El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, salió en defensa del subscetrario del departamento de Justicia, Rod Rosenstein, y señaló el jueves tener la “mayor confianza” en él, tras rechazar las demandas de un bloque conservador de legisladores republicanos que buscan destituir a Rosenstein de su cargo.
En una conferencia de prensa en Boston, Sessions dijo: "Mi adjunto Rod Rosenstein es muy capaz". “Lo que me gustaría que el Congreso haga es centrarse en algunos de los desafíos legales que existen. Necesitamos que el Congreso trate con la cuestión de la inmigración", agregó Sessions.
Paul Ryan no respalda juicio político
De igual manera, el líder de la Cámara Baja, Paul Ryan, manifestó el jueves que no apoya el intento de destituir al subsecretario de Justicia Rod Rosenstein promovido por 11 legisladores de su bancada republicana.
Ryan señaló que es importante para la Cámara poder supervisar al departamento de Justicia y que simpatizaba con la frustración expresada por sus colegas, pero señaló que no había visto nada que se compare al nivel de la acusación.
"No creo que debamos ser arrogantes", dijo a los periodistas. "No creo que –las acusaciones- llegan al nivel de 'altos crímenes y delitos menores'".
Paul Ryan también planteó el hecho de que este tipo de discusiones tanto en la Cámara como en el Senado, lo único que ocasionan es retrasar otros temas de la agenda como la potencial confirmación del juez Brett M. Kavanaugh a la Corte Suprema.
Los conservadores de línea dura acordaron previamente suspender la votación prevista para el jueves para destituir a Rosenstein, luego de asegurar el compromiso de los líderes republicanos de declarar a los funcionarios del departamento de Justicia en desacato al Congreso si no entregan documentos específicos en las próximas semanas.
El acuerdo básicamente posterga el enfrentamiento hasta que los legisladores regresen de un receso de cinco semanas que empezaría después de las votaciones del jueves.
Once legisladores conservadores de la Cámara de Representantes presentaron argumentos el miércoles para abrir un juicio político al subsecretario de Justicia de Estados Unidos, Rod Rosenstein, quien supervisa la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre Rusia.
La iniciativa se presentó tras meses de críticas contra el departamento -y la pesquisa sobre la intromisión electoral de Rusia en concreto- por parte de Trump y sus aliados republicanos en el Congreso.
El presidente restó importancia a la investigación de Mueller calificándola repetidamente de "caza de brujas", una frase repetida por algunos legisladores.
La iniciativa está liderada por Mark Meadows, representante por Carolina del Norte, quien habla frecuentemente con Trump y lo defiende ante sus colegas.
Meadows, el diputado por Ohio Jim Jordan y otros republicanos que impulsaron la resolución criticaron a Rosenstein y al Departamento de Justicia por no responder a los pedidos de los comités de la Cámara solicitando documentos relacionados con el inicio de la pesquisa sobre Rusia y sobre otra cerrada acerca de los correos electrónicos de la aspirante presidencial demócrata, Hillary Clinton.
Los cinco artículos acusan a Rosenstein de "delitos graves y menores" por no proporcionar información a los comités, pese a que el departamento entregó ya más de 800.000 documentos a los legisladores, y por firmar lo que los republicanos consideran que fue una vigilancia inapropiada a un asesor de Trump.