El presidente Barack Obama mandó un mensaje claro a los republicanos de la Cámara de Representantes de que no tomará acciones ejecutivas para hacer una reforma inmigratoria, y se ofreció a trabajar directamente con el Congreso en este tema.
“Hay algunas cosas grandes que no puedo hacer a través de una acción ejecutiva, en las que tenemos que conseguir (la ayuda) del Congreso y donde el pueblo estadounidense está de nuestro lado. Una es la ley de salario mínimo. Pero otra es asegurar una política inmigratoria inteligente que haga crecer a nuestra economía, que haga salir de las sombras a la gente”, dijo.
El presidente habló ante una conferencia de legisladores demócratas actualmente reunidos en Cambridge, Maryland, pero el mensaje lo hizo tratando de calmar los temores de que pueda tomar acción en algunos temas, incluyendo el de la reforma migratoria, por cuenta propia.
Los republicanos de la Cámara, primero divulgaron una lista de intenciones sobre la reforma, pero luego dijeron que ésta era imposible de hacer este año por la desconfianza que tienen en el presidente Obama.
El mandatario dijo que la reforma es una de las más importantes “prioridades” de su gobierno, añadiendo que cree que “hay muchos en el otro lado del debate que genuinamente quieren ver que se haga esto, pero están preocupados y temerosos de las consecuencias políticas”.
“Todos aquí son funcionarios electos y podemos entender las maniobras que se hacen particularmente en un año electoral. Pero cuando se habla de la reforma inmigratoria, no debemos olvidar que hay personas detrás de las estadísticas, y vidas que son impactadas – que dejar las cosas para dentro de uno, dos, o tres años va a golpear a la gente. Golpea nuestra economía. Golpea a las familias”, agregó.
El mandatario dijo que, en cambio, buscará trabajar por cuenta propia en temas como la creación de trabajo, la mejora de los salarios, el entrenamiento, educación y la seguridad del retiro.
“Hay algunas cosas grandes que no puedo hacer a través de una acción ejecutiva, en las que tenemos que conseguir (la ayuda) del Congreso y donde el pueblo estadounidense está de nuestro lado. Una es la ley de salario mínimo. Pero otra es asegurar una política inmigratoria inteligente que haga crecer a nuestra economía, que haga salir de las sombras a la gente”, dijo.
El presidente habló ante una conferencia de legisladores demócratas actualmente reunidos en Cambridge, Maryland, pero el mensaje lo hizo tratando de calmar los temores de que pueda tomar acción en algunos temas, incluyendo el de la reforma migratoria, por cuenta propia.
Los republicanos de la Cámara, primero divulgaron una lista de intenciones sobre la reforma, pero luego dijeron que ésta era imposible de hacer este año por la desconfianza que tienen en el presidente Obama.
El mandatario dijo que la reforma es una de las más importantes “prioridades” de su gobierno, añadiendo que cree que “hay muchos en el otro lado del debate que genuinamente quieren ver que se haga esto, pero están preocupados y temerosos de las consecuencias políticas”.
“Todos aquí son funcionarios electos y podemos entender las maniobras que se hacen particularmente en un año electoral. Pero cuando se habla de la reforma inmigratoria, no debemos olvidar que hay personas detrás de las estadísticas, y vidas que son impactadas – que dejar las cosas para dentro de uno, dos, o tres años va a golpear a la gente. Golpea nuestra economía. Golpea a las familias”, agregó.
El mandatario dijo que, en cambio, buscará trabajar por cuenta propia en temas como la creación de trabajo, la mejora de los salarios, el entrenamiento, educación y la seguridad del retiro.