Grupos conservadores presupuestaron invertir al menos $1.000 millones de dólares en la campaña política en apoyo del Partido Republicano y su candidato Mitt Romney, que tendrá como fin derrotar al presidente Barack Obama y al Partido Demócrata en las próximas elecciones presidenciales y legislativas, para conseguir una mayoría de las curules en el Congreso de Estados Unidos.
Los miembros impulsores de esta iniciativa, son la organización American Crossroads, liderada por Karl Rove; el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC), Tom Donohue, y los hermanos Koch, dueños de la tercera fortuna más grande del país.
La campaña ‘antiObama’, abarcará los medios de comunicación masivos y está diseñada estratégicamente para impactar en los Estados.
Por cada jurisdicción se destinará un presupuesto de $400 millones de dólares, cifras históricas según Centro de Política Responsable (CRP), quien afirmó que estas elecciones al superar los $6 billones de dólares serán las más costosas de la historia.
La inversión que pretenden hacer los republicanos para las elecciones legislativas y presidenciales el próximo mes de noviembre, supera los $1.000 millones de dólares recaudados por Romney para su campaña en las primarias y los $750 millones que Barack Obama recolectó para su campaña presidencial en 2008.
El elevado nivel de gasto en la campaña, es posible debido a que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos, en el 2010, permitió a empresas y sindicatos un uso ilimitado de propaganda lo que aprovechará el partido para iniciar una agresiva acción publicitaria que incluye radio, televisión, Internet y llamadas telefónicas.
Por su parte, el presidente Obama, considerado uno de los más prolíficos recaudadores en la historia de Estados Unidos, habría recogido cerca de $450 millones de dólares y tendría en sus ahorros otros $150 millones que planea invertir en su campaña reeleccionista.
Los miembros impulsores de esta iniciativa, son la organización American Crossroads, liderada por Karl Rove; el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC), Tom Donohue, y los hermanos Koch, dueños de la tercera fortuna más grande del país.
La campaña ‘antiObama’, abarcará los medios de comunicación masivos y está diseñada estratégicamente para impactar en los Estados.
Por cada jurisdicción se destinará un presupuesto de $400 millones de dólares, cifras históricas según Centro de Política Responsable (CRP), quien afirmó que estas elecciones al superar los $6 billones de dólares serán las más costosas de la historia.
La inversión que pretenden hacer los republicanos para las elecciones legislativas y presidenciales el próximo mes de noviembre, supera los $1.000 millones de dólares recaudados por Romney para su campaña en las primarias y los $750 millones que Barack Obama recolectó para su campaña presidencial en 2008.
El elevado nivel de gasto en la campaña, es posible debido a que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos, en el 2010, permitió a empresas y sindicatos un uso ilimitado de propaganda lo que aprovechará el partido para iniciar una agresiva acción publicitaria que incluye radio, televisión, Internet y llamadas telefónicas.
Por su parte, el presidente Obama, considerado uno de los más prolíficos recaudadores en la historia de Estados Unidos, habría recogido cerca de $450 millones de dólares y tendría en sus ahorros otros $150 millones que planea invertir en su campaña reeleccionista.
