Una posible alianza entre Ecopetrol y PDVSA, anuncio que hizo hace días en Caracas el presidente de Colombia, Gustavo Petro, es aún una iniciativa poco clara, que podría resultar incierta y afectar a la petrolera colombiana y ser favorable para la empresa venezolana, aseguran expertos consultados por la Voz de América.
“Es muy probable que Ecopetrol se vuelva socio de PDVSA, en la explotación de campos de gas y petróleo en Venezuela”, afirmó el mandatario colombiano, durante la cuarta reunión privada con su homólogo venezolano, en el palacio presidencial de Miraflores.
De momento, sin embargo, no parece estar claro el rol de cada una de las empresas involucradas.
Para el exministro de Hacienda y Crédito Público de Colombia y expresidente de Ecopetrol, Juan Carlos Echeverry, esta asociación sería “una pésima idea”, porque, aunque aclaró que “entrar a Venezuela es muy buen negocio”, asociarse con PDVSA implicaría entrar a negociar, en un marco de incertidumbre.
“Es una pésima empresa mal manejada por militares, donde se involucra al presidente [Nicolás] Maduro; donde cualquier día Maduro se pone bravo y dice no le paguen Ecopetrol 300 millones o 200 millones o 100 billones de dólares y nos metemos en problemas”, anotó, en entrevista con la VOA.
Es un opinión que comparte Mónica Bernal Montero, profesora de la Facultad de Ciencias Económicas e investigadora del Laboratorio de Sostenibilidad Empresarial de la Pontificia Universidad Javeriana de Colombia, al señalar que PDVSA, al “estar en cabeza el presidente de Venezuela, en este caso, genera una incertidumbre política por lo que está sucediendo en esta país”.
“No se sabe la inestabilidad que tiene Venezuela. También nos preocupa qué tan seguro es la explotación allá en el país, en cuanto a seguridad de la población, seguridad del territorio y de las comunidades, y pues la contaminación que se puede llegar a generar”, agregó la académica.
Acuerdos bienvenidos
Contrario para Ecopetrol, la alianza sería favorable para Venezuela, dicen los expertos.
Todo acuerdo que ayude o reporte dividendos a la estatal venezolana PDVSA será “bienvenido” en Venezuela, apuntó el economista y especialista en el sector petrolero, Luis Oliveros.
“En este momento, PDVSA no tiene muchas herramientas para una cooperación energética con Ecopetrol. No veo la forma en la podamos generarle valor a Ecopetrol”, comentó el experto en conversación con la VOA.
La compañía petrolera del Estado venezolano vivió una renovación de sus cuadros gerenciales luego de que, en marzo pasado, el gobierno de Maduro destapara una red de corrupción en la industria que causó millonarias pérdidas y dejó decenas de arrestos.
Esa trama corrupta, conocida como PDVSA Cripto, habría desfalcado al Estado más de 20.000 millones de dólares en facturas sin cobrar de operaciones petroleras, según investigaciones de la agencia Reuters, que tuvo acceso a esas cuentas.
El anuncio de una sociedad cercana entre PDVSA y Ecopetrol se revela solo semanas después de que EEUU aliviase sus sanciones económicas a los sectores de petróleo y gas en Venezuela para incentivar acuerdos políticos con la oposición.
Ese alivio de sanciones, que incluyen operaciones y labores de mantenimiento de PDVSA y sus filiales por parte de compañías extranjeras, tiene una vigencia inicial de 6 meses, es decir, hasta mayo de 2024. La estadounidense Chevron, la española Repsol y la italiana Eni, entre otras, están involucradas en proyectos especiales con la estatal venezolana.
Según los analistas, en cualquier momento, la petrolera venezolana puede ser sancionada por Estados Unidos y generar implicaciones sobre la empresa colombiana.
La necesidad de Colombia
Según explicó Mónica Bernal lo que puede estar considerando el gobierno colombiano, con la idea de Petro, es explorar posibilidades para buscar reservas con miras a la posible escasez de gas que se pueda presentar en el país para enfrentar el fenómeno de El Niño.
Al igual que para la transición energética, opinó Bernal, para que “realmente se empiece a materializar la interconexión de zonas… que se genere ese proceso de de interconexión que se necesita, ese gas para soportar el desarrollo”.
Para Echeverry, contrario a Venezuela, Colombia tiene pocas reservas, pero para entrar a dicho país, es aconsejable hacerlo de la mano de compañías internacionales.
En este sentido, la profesora Bernal aseguró que la negociación con empresas privadas sería “más adecuado”, lo que permitiría recuperar la infraestructura de gaseoductos y, a nivel económico, podría representar “una reactivación del comercio con Venezuela y que la facilidad de transporte de estas materias primas y recursos, generaría una disminución de costos en la exportación o importarla a otras regiones”.
Oliveros, por su parte, recordó a la VOA que Colombia “no tiene muchas reservas” de crudo. “Le quedan para pocos años”, a diferencia de Venezuela, subraya.
Colombia tiene reservas de petróleo para 7,5 años y de gas para 7,2 años, de acuerdo con cifras de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, del Ministerio de Minas y Energías de esa nación suramericana, publicó el diario español El País en mayo pasado.
En cambio, las reservas de crudo de Venezuela son las más grandes entre los países miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), superando las de otras naciones, como Arabia Saudita, Irak e Irán.
PDVSA reportó a la OPEP en 2021 que sus reservas probadas de crudo superaban los 300.000 millones de barriles.
Oliveros insistió en que, por ello, a Colombia “sí le interesa establecer alianzas con Venezuela, ver si pueden producir petróleo aquí, asociarse con PDVSA en la explotación de campos maduros”.
El analista petrolero acotó, no obstante, que Venezuela no tiene hoy excedentes de gas ni gasolina para comercializar, si bien “sí necesita inversión en campos”.
Venezuela, opinó, “debe firmar la mayor cantidad de convenios posibles, que traigan inversiones y permitan aumentar producción” en el sector energético.
La infraestructura es clave
Según el diario La República de Colombia, PDVSA ofreció a Ecopetrol venderle gas natural a partir de diciembre de 2024. Los acuerdos políticos de los que depende el alivio de sanciones económicas en Venezuela dependen particularmente de la realización de elecciones presidenciales libres, justas y transparentes en el segundo semestre de 2024.
El economista y experto en negociaciones energéticas, Orlando Ochoa, anticipó que deben corregirse los “problemas” que ha acumulado la infraestructura de PDVSA para poder acometer esos acuerdos gasíferos con Colombia.
Ecopetrol emitió un comunicado posterior a la vista de Petro a Venezuela donde recordó que tiene un contrato vigente desde 2007 hasta 2027 con PDVSA para la compraventa y transporte de gas a través del gasoducto binacional Antonio Ricaurte.
Ese convenio permitió exportar gas a Venezuela, pero en la actualidad se encuentra “en período de estabilización de equipos” para permitir flujos hacia Colombia, indicó.
En términos de producción petrolera, Ochoa estimó que Venezuela y Colombia podrían aliarse para tratar de comercializar crudo a dos manos hacia los mercados de Estados Unidos, la costa del Golfo binacional, México y probablemente Asia.
El Ministro de Minas y Energías de Colombia, Andrés Camacho, dijo la semana pasada que “realizar negocios con PDVSA abre oportunidades para ambos países. Una alianza entre PDVSA y Ecopetrol es un ganar-ganar donde se benefician Colombia y Venezuela”.
No obstante, los expertos explican que la idea debe ser evaluada por un comité técnico, además de la Junta Directiva de Ecopetrol, que señaló en su comunicado tras el anuncio de Petro que analiza las alternativas presentadas por PDVSA para suministrar gas natural a Colombia, desde diciembre del próximo año.
Dijo además que solicitó a la administración evaluar las opciones para “asegurar la disponibilidad de gas en las cantidades y tiempos requeridos, dentro del marco legal y las limitaciones existentes, a efectos de garantizar la seguridad energética de manera oportuna y costo-eficiente para beneficio del sector y del país”.