Portugal se desquitó de su eliminación en los octavos de final del Mundial de Sudáfrica con un triunfo amplio ante España (4-0).
La “furia roja” cierra con derrota su gran año 2010, después de coronarse campeona del mundo, en el pasado Mundial.
A España, que estrenaba en su camiseta la escarapela de campeona universal, no le bastó esta vez con el toque, con su juego combinado, con su mágico fútbol, porque se mostró en exceso parsimonioso y con escasas rupturas. Hasta le faltó el acierto mínimo.
Portugal, herida por su prematuro adiós mundialista, actuó con mucha más intensidad. En el primer tiempo Cristiano Ronaldo, para quien no hay partidos amistosos, atesoró todas las miradas con un juego vertical y con un gol legítimo anulado por el línea, mientras que en la segunda mitad, los lusos destrozaron a España a la contra.
Fue exactamente una pelota que recuperó Ronaldo, quien lanzó un poderoso tiro para el rechace de Casillas, lo que provocó la llegada de Carlos Martins para batir la meta española, justo al cierre de los primeros 45 minutos.
El protagonismo de Ronaldo se quedó en el descanso, porque el técnico luso lo suplió por Danny pero ya la historia había decido su curso.
Aunque fue España quien amenazó en los inicios del segundo tiempo, el cuadro luso simplemente perfeccionó el contragolpe con lo que masacró a la “roja”.
Tres goles más llegaron con la misma fórmula y España termina un año mágico con goleada.