El presidente de Estados Unidos, Barak Obama, eligió al jefe del Comando Central de Estados Unidos, general David Petraeus, en reemplazo del general del ejército, Stanley McChrystal, quien renunció después de que él y sus subordinados se burlaran de funcionarios del gobierno en un artículo de la revista Rolling Stone.
El presidente ordenó al McChrystal que regresara a Washington desde Afganistán, y el miércoles se reunió con él por media hora en la Oficina Oval.
El militar salió de la Casa Blanca sin asistir a una reunión del equipo de seguridad nacional de Obama.
Posteriormente, el mandatario elogió la dedicación, inteligencia y amor al país de McChrystal, pero dijo que sus comentarios socavaron el control civil del ejército.
El presidente Obama dijo que la controversia destacó las diferencias dentro de su gobierno sobre la forma de proceder en Afganistán, pero señaló que es hora de que esos desacuerdos terminen.
“Le he dicho a mi equipo de seguridad nacional que ahora es tiempo de que estemos unidos. Hacerlo, no es una opción sino una obligación. Acepto el debate entre los miembros de mi equipo, pero no toleraré la división”, dijo el primer mandatario.
En el senado, republicanos y demócratas apoyaron el nombramiento de Petraeus.
El demócrata Carl Levin, presidente de la Comisión de Servicios Armados, dijo que “por muchas razones, el general Petraeus es una selección sólida para asumir el comando en Afganistán”.
Levin también afirmó que la audiencia de confirmación para el general tendrá lugar en los siete próximos días.
El senador independiente Joe Lieberman, de Connecticut, dijo que los desafortunados comentarios de McChrystal revelaron la falta de unidad en Afganistán, entre el liderazgo civil y militar, que es ampliamente conocido.
“Espero que todo esté claro y que todos los miembros del equipo, civiles y militares, trabajen ahora junto con el comandante en jefe para lograr el éxito que necesitamos en Afganistán”, reiteró Lieberman.
“Es un punto bajo, creo yo, para las Fuerzas Armadas en un largo tiempo y me alegro que el presidente tomara esa decisión, y también hay otros oficiales que deben ser ubicados y necesitan ser reemplazados” dijo el senador republicano Lindsey Graham, de Carolina del Sur afirmando que el presidente no tenía otro remedio que remplazar al general McChrystal, y que los cambios no deberían terminar allí.
En Kabul, el vocero del gobierno afgano, Waheed Omar, dijo que aunque la partida de McChrystal es lamentable, el general Petraeus es el mejor reemplazo posible.
