Reporteros Sin Fronteras (RSF) dio a conocer el resumen anual mundial de violencia mortal y tratamiento abusivo contra periodistas, en el que detalló que el periodismo sigue siendo una profesión peligrosa pero el número de informadores asesinados para 2019 se redujo a un índice "históricamente bajo”.
La institución, cuyo objetivo es defender la libertad de prensa en el mundo, dijo que un total de 49 periodistas fueron asesinados este año, 389 están actualmente en prisión y 57 han sido retenidos como rehenes.
De acuerdo a RSF este año está en su punto más bajo desde 2003 y representa una espectacular caída del 44% respecto a la cifra del año pasado en comparación con los 80 periodistas asesinados durante las últimas dos décadas en zonas de guerra.
Siria, Yemen y Afganistán han sido históricamente unos de los lugares que representan mayor riesgo para los periodistas, sin embargo, en estos tres países en 2019 solo se reportaron 17 asesinatos de comunicadores en comparación con 34 en 2018. Dato que de acuerdo con RSF, “no debe eclipsar el hecho de que el número de asesinatos de reporteros en países en paz siguen siendo tan altos como en años anteriores. En México, por ejemplo, diez periodistas fueron asesinados en 2019, el mismo número que el año pasado”.
RSF enfatizó que solo en América Latina un total de 14 miembros de la prensa perdieron la vida por ejercer su profesión y que la región, es ahora tan mortal para los periodistas como el Medio Oriente con todas sus guerras.
"La frontera entre países en guerra y países en paz está en proceso de desaparición para periodistas”, dijo el secretario general de RSF, Christophe Deloire.
"Damos la bienvenida a la caída sin precedentes en el número de periodistas asesinados en zonas de guerra, pero, al mismo tiempo, más y más periodistas están siendo asesinados deliberadamente en relación con su trabajo en países democráticos, lo que plantea un verdadero desafío”, puntualizó.