El papa Francisco celebró la fiesta de Epifanía haciendo un llamado al mundo católico al que pidió hacer uso de la “santa astucia” para salir a la búsqueda de la verdadera luz de Cristo en el camino de la fe.
La “santa astucia”, explica el Papa, es esa sagacidad espiritual que permite reconocer los peligros y evitarlos como lo hicieron los Reyes Magos para escapar de Herodes e ir en busca del niño Dios y adorarlo.
El ejemplo que dieron los Reyes Magos significa que no podemos contentarnos con "una vida mediocre" ni con "grandes apariencias", sino acercarnos a la sencillez porque, como ellos, "buscamos la luz", dijo el papa ante miles de feligreses.
Al finalizar la homilía, el papa besó la figura del Niño Jesús y fue despedido por el coro de niños de la Capilla Sixtina . Posteriormente se asomó a la ventana del Palacio
Apostólico ante una abarrotada Plaza de San Pedro para continuar su discurso sobre la importancia y el verdadero sentido de la Epifanía.
La “santa astucia”, explica el Papa, es esa sagacidad espiritual que permite reconocer los peligros y evitarlos como lo hicieron los Reyes Magos para escapar de Herodes e ir en busca del niño Dios y adorarlo.
El ejemplo que dieron los Reyes Magos significa que no podemos contentarnos con "una vida mediocre" ni con "grandes apariencias", sino acercarnos a la sencillez porque, como ellos, "buscamos la luz", dijo el papa ante miles de feligreses.
Al finalizar la homilía, el papa besó la figura del Niño Jesús y fue despedido por el coro de niños de la Capilla Sixtina . Posteriormente se asomó a la ventana del Palacio
Apostólico ante una abarrotada Plaza de San Pedro para continuar su discurso sobre la importancia y el verdadero sentido de la Epifanía.