El Papa Francisco aceptó la renuncia del cardenal Donald Wuerl como arzobispo de Washington, D.C., dijo el Vaticano el viernes, lo que le convierte en una de las figuras más destacadas que deja su cargo en medio de la crisis por abusos sexuales que vive el catolicismo a nivel mundial.
Wuerl, de 77 años, que fue obispo de Pittsburgh entre 1988 y 2006, estaba sometido a un duro escrutinio por su manejo de los casos de abuso sexual ocurridos durante ese periodo. Pese a la renuncia, mantendrá su título de cardenal.
En una carta del Papa publicada en Washington, Francisco indicó que aceptó la renuncia con reparos ante la insistencia de Wuerl. Asimismo, le pidió que siga como administrador hasta que pueda ser nombrado otro arzobispo.
Wuerl estaba presionado desde la publicación en agosto de un reporte de un gran jurado sobre abusos sexuales que halló pruebas de que al menos mil personas, en su mayoría niños, sufrieron abusos sexuales por parte de unos 300 clérigos a lo largo de 70 años. El informe cubrió seis diócesis en Pensilvania, incluida Pittsburgh, cuando era liderado por Wuerl.
También fue acusado de conocer las conductas sexuales impropias de su predecesor en Washington, el excardenal Theodore McCarrick, algo que rechazó.
