El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, dijo que los países de la organización apoyan la nueva estrategia afgana del presidente estadounidense, Barack Obama, y que enviarán por lo menos 5.000 soldados más para luchar contra la insurgencia en el país asolado por la guerra.
El jefe de la OTAN dijo en Bruselas, que todos los países de la alianza deben hacer más en la lucha contra el Talibán y al-Qaeda si realmente quieren un Afganistán más estable.
Rasmussen prometió que la OTAN y sus aliados se esforzarán para una transición hacia un rol donde el pueblo afgano pueda tomar control de la seguridad de su país. Pero agregó que la palabra “transición” no es un código para una salida estratégica.
El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, dijo que la decisión de Obama de enviar 30.000 soldados más es muy difícil, pero una estrategia necesaria.
El general Stanley McChrystal, el comandante de Estados Unidos y la OTAN en Afganistán, dijo que la claridad, el compromiso y la resolución destacados en el discurso del Presidente son críticos para eliminar los refugios seguros para terroristas que amenazan la seguridad regional y global.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, dijo que respalda totalmente la nueva estrategia de Obama y calificó el anuncio como “valiente” y dijo que da un nuevo impulso a la participación internacional en Afganistán.
La oficina del presidente afgano, Hamid Karzai, dijo que él y Obama hablaron aproximadamente una hora sobre la estrategia.
