Cada día se suman voces en el mundo para pedir respuestas y pronta ayuda ante la crisis que vive la Amazonía desde hace más de veinte días. Los incendios que consumen al "pulmón del mundo" han generado indignación internacional, pero ¿qué antecede a esta grave situación?
Lo que sucede en el Amazonas
Según datos del Instituto Nacional para la Investigación Espacial (INPE), agencia federal que monitorea la deforestación y los incendios en Brasil, este año hubo una cantidad creciente de incendios forestales con un total de 76.720 hasta el jueves.
Esto equivale a un aumento del ochenta y cinto por ciento, en comparación con el mismo período del año pasado y un poco más de la mitad corresponde a áreas de bosque amazónico, además los focos han crecido en los últimos días.
La agencia no tiene datos sobre el área consumida por el fuego, pero sí hay indicadores de que la deforestación se ha acelerado sensiblemente este año. El INPE reportó que entre el 1 de enero y el 1 de agosto, fueron deforestados 9.250 kilómetros cuadrados, superando el total de todo el 2018, que había sido de 7.537 kilómetros cuadrados.
¿Cuál es la gravedad de los incendios?
De los 78.383 incendios que se han registrado en lo que va del año en Brasil, aproximadamente la mitad han sido en agosto.
Ocho de los nueve estados amazónicos han sufrido un aumento, mientras que Amazonas, el estado más grande, ha experimentado un incremento del 146 por ciento.
Residentes de los estados de Rondonia y Amazonas dijeron que, aunque todos los años hay incendios, nunca habían visto una situación tan grave, en la que nubes de humo han cubierto la región.
Especialistas en medioambiente dicen que es normal el aumento de los focos de incendio durante la estación seca, entre julio y noviembre; sin embargo, han alertado sobre la magnitud de los mismos en este año.
Aunque la porción mayoritaria del bioma (conjunto de ecosistemas de la zona) está en suelo brasileño, el fuego también alcanza territorios de otros países como Bolivia. El avance del fuego ha puesto en alerta a líderes y organizaciones de todo el mundo que reclaman que el gobierno brasileño tome cartas en el asunto.
¿Por qué se han presentado los incendios?
Expertos en medio ambiente sugieren que existe una relación directa entre el aumento de la deforestación en Brasil y el mayor número de focos de incendio en la Amazonía.
Los incendios a menudo son causados a propósito. Después de que los aserraderos extraen la madera, los especuladores queman la vegetación restante para despejarla con la esperanza de vender la tierra a los agricultores y ganaderos.
La Amazonía lleva varios meses en su estación seca, lo cual es también una situación propicia para que se propaguen más fácilmente y quedar fuera de control.
La deforestación ha aumentado un 67% en los primeros siete meses de 2019 y se ha triplicado con creces en el mes de julio. Los ecologistas creen que los que deforestan son los mismos que inician los incendios.
Un estudio del IPAM, organismo de investigación del Amazonas, reveló que 10 municipios de la región más deforestada concentran la mayor cantidad de incendios. Algunos agricultores utilizan el fuego para renovar el suelo, pero también para abrir áreas con el fin de explotar recursos naturales.
Sin embargo, analistas creen que las quemas con fines ilegales explican el 80% de los incendios.
Paulo Moutinho, miembro del IPAM, aseguró que “es muy difícil tener incendios naturales en la Amazonía. Suceden en su mayoría por la mano del hombre".
Dijo además que, si hubiese habido sequías como en el nivel de los últimos cuatro años, la situación habría sido "incluso peor".
El Ministerio Público brasileño investiga si una menor fiscalización ambiental y el retiro de apoyo a organizaciones ambientales por parte del gobierno del presidente Jair Bolsonaro favorecieron la propagación de los incendios.
¿Qué reacción ha tenido el gobierno de Brasil?
Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, inicialmente sugirió que los incendios eran normales, pero después dijo que organizaciones no gubernamentales (ONG) los estaban provocando para dañar a su gobierno. Sin embargo, al no tener pruebas al respecto, más tarde se retractó de dicha afirmación.
Bolsonaro ha dicho que el país no tiene los recursos para combatir los incendios en un área tan grande como el Amazonas, a la vez que ha advertido a otros países que no interfieran diciendo que el dinero extranjero pretende socavar la soberanía de Brasil.
Finalmente, el gobierno ha decidido movilizar a los militares para combatir los incendios y varios estados amazónicos han solicitado apoyo. Todavía no está claro cómo se desplegarán las fuerzas armadas y cuál será su eficacia.
Bolsonaro, ha pedido a la población que ayude al gobierno denunciando actos vandálicos y admitió el crecimiento de la deforestación durante su gobierno y adujo falta de recursos económicos para combatirla.
Por otro lado, ecologistas dicen que quienes provocaron los incendios han sido alentados por los llamamientos de Bolsonaro a un mayor desarrollo del Amazonas y al pensar que no serán castigados.
Lo que dicen los líderes mundiales
Emmanuel Macron, presidente de Francia, ha calificado los incendios como una emergencia internacional y de “ecocidio”, además de criticar al Gobierno de Brasil por no hacer más para proteger la selva tropical.
La oficina de Macron, dijo en un comunicado que se opondría a la eventual aprobación del tratado de libre comercio entre la Unión Europea y el bloque comercial sudamericano Mercosur, porque Bolsonaro mintió sobre las preocupaciones medioambientales en la cumbre del G20 de junio, cuando se acordó por primera vez.
El primer ministro británico Boris Johnson y la canciller alemana Angela Merkel, han dicho que están preocupados por la destrucción del Amazonas, pero que bloquear el acuerdo comercial no es la respuesta correcta.
El domingo, Macron dijo que los líderes de Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Canadá estaban ultimando un posible acuerdo en su cumbre anual sobre “ayuda técnica y financiera” para los países afectados por los incendios, incluido Brasil.
Por su parte, el presidente Donald Trump ofreció a Bolsonaro la ayuda de su país, en una llamada telefónica, pero funcionarios brasileños dijeron posteriormente que no estaban trabajando con Estados Unidos para combatir los incendios.
Cumbre del G7 desbloqueará ayuda de emergencia
Por otro lado, en la reunión del G7 se decidió desbloquear una ayuda de urgencia de veinte millones de euros (22 millones de dólares) para la Amazonía, principalmente destinados al envío de aviones bombarderos de agua que puedan luchar contra los incendios. Así lo afirmaron el presidente de Francia, Emmanuel Macron y su homólogo chileno, Sebastián Piñera.
De acuerdo con Macron: "también habrá ayuda concreta. Francia brindará apoyo militar en la región durante las próximas horas. En el próximo mes construiremos una iniciativa para la Amazonía que será presentada oficialmente en la asamblea general de la ONU".
Además del envío de una flota aérea, el G7 decidió un plan de ayuda a mediano plazo destinado a la reforestación que será presentado a la Asamblea General de la ONU a finales de septiembre. Para ese plan será necesario el acuerdo de Brasil y un trabajo con las ONG y las poblaciones locales.
Al respecto, Jair Bolsonaro, dijo a través de su cuenta de Twitter: "No podemos aceptar que un presidente, Macron, desate ataques irrazonables e irracionales contra la Amazonía, ni disfrace sus intenciones detrás de la idea de una "alianza" de los países del G-7 para "salvar" la Amazonía, como si fuéramos una colonia o una tierra de nadie".
La urgencia de actuar pronto
La Amazonía (un 60% de la cual se encuentra en Brasil) es la selva tropical más grande del mundo. Se considera un punto clave de biodiversidad, con muchas especies únicas de plantas y animales.
Esta densa selva absorbe una enorme cantidad del dióxido de carbono del mundo, un gas de efecto invernadero que se cree es el mayor factor del cambio climático, por lo que los científicos dicen que preservar la Amazonia es vital para combatir el calentamiento global.
Los brasileños han salido a las calles para protestar contra la inacción del Gobierno ante los incendios en más de una docena de ciudades, cerrando las principales carreteras de Brasilia y Sao Paulo. Se han realizado manifestaciones ante las embajadas brasileñas en París y Londres.
En las redes sociales, #PrayForAmazonas (“Reza por la Amazonia”) y otras etiquetas similares han tenido un gran éxito en Twitter. Los usuarios que publican mensajes en apoyo de Bolsonaro también han convertido en tendencia un “hashtag” que se traduce como “AmazoniaSinONG”.