El año 2015 batió un nuevo récord de refugiados en el mundo con más de 65 millones de personas, donde el 51 % de ellas son niños, es el reporte de la Oficina del Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
En entrevista con la Voz de América, María Jesús Vega, portavoz de esta agencia de la ONU en su sede en España, destacó las cifras a tiempo de resaltar la necesidad de una acción internacional conjunta.
“El objetivo de las naciones tiene que ser frenar la huída de las personas de zonas de conflicto o que implican peligro y para esto deben buscar soluciones permanentes”, afirmó Vega.
Vega advierte así mismo que este fenómeno también afecta a Latinoamérica, en especial las naciones centroamericanas.
“Lo que hemos visto es un aumento en el número de personas que huyen de la violencia en El Salvador, Honduras y Guatemala y el incremento es del 17 %”, revela Vega.
La portavoz sostuvo que en 2015 fueron más de 100 mil las personas que llegaron a México y a Estados Unidos. “Esta cifra, fuera de ser alarmante por su magnitud es preocupante por las connotaciones de violencia, tráfico de personas y abusos de todo tipo que estas personas sufren en la travesía”, destaca Vega.
Una vez más, la portavoz de la Oficina del Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados dice que la preocupación fundamental es la motivación de los desplazados.
“Lo más triste de esta situación es que nuestras estadísticas dicen que hay más de 90 mil niños y niñas solos que han pedido protección en el mundo, esto los convierte en los más vulnerables de los vulnerables”, dice Vega.
Por todas estas razones, esta Agencia de la ONU está impulsando la campaña de recolección de firmas #ConLosRefugiados que pretende reunir millones de ellas para presentarlas el 19 de septiembre en la Asamblea de las Naciones Unidas para llamar la atención al desplazamiento obligado de miles de personas en el mundo y que el tema sea incluído en la agenda internacional.
