Denuncias de organizaciones no gubernamentales afirman que 19 niños murieron durante el último año en Venezuela por fallas en los servicios del Hospital Pediátrico JM de los Ríos, el principal nosocomio infantil, y los familiares de los pequeños ingresados exigen al gobierno atender la situación de ese centro de salud.
Carmen López, es la madre de uno de los infantes hospitalizados y afirma que el recinto no cuenta con los equipos necesarios para prestar servicios y tampoco con los tratamientos indispensables.
"A pesar de esta situación de que todo el mundo sabe con respecto a la carencia de antibióticos y que cada día se hace más difícil, los niños siguen falleciendo y hasta ahora no hemos obtenido ninguna solución", dice López.
El defensor de los derechos infantiles, Carlos Trappani, recordó que los niños atendidos en el servicio de nefrología del Hospital JM de los Ríos recibieron medidas de protección por parte de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, pero el Estado venezolano no acató la decisión.
"El servicio de nefrología es uno más de los problemas que están afectando a los niños. Nuestras proyecciones para este año es que las dificultades para las familias se van a agudizar y se van a incrementar", indicó Trappani.
Sin embargo, el presidente Nicolás Maduro, desestima las denuncias y en repetidas oportunidades las calificó como "exageradas".
"Son decenas de miles de vidas que se salvan mensualmente por el sistema de salud primario, básico", señaló Maduro.
De acuerdo con la encuesta nacional de hospitales 2018, un 20% de los quirófanos en el país están inoperables mientras que la escasez de material quirúrgico alcanza un 79%.