El Departamento de Estado de Estados Unidos declaró alerta máxima de no viajar a China, en una advertencia el viernes, horas después que la Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó que el coronavirus constituye una emergencia de salud pública de preocupación internacional.
“Los viajeros deben estar preparados para que las restricciones de viaje se apliquen con poca o ninguna notificación previa. Los transportistas comerciales han reducido o suspendido las rutas hacia y desde China”, explicó la institución por medio de su portal web.
Además, se ha solicitado que todo el personal no esencial del gobierno de EE.UU. aplace los viajes a China.
Esta iniciativa constituye un esfuerzo por contener el nuevo coronavirus, las autoridades chinas han suspendido los viajes aéreos, por carretera y ferroviarios en el área alrededor de Wuhan y han impuesto restricciones a los viajes y otras actividades en todo el país.
La Organización Mundial de la Salud declaró como una emergencia global el jueves el brote provocado por un nuevo virus en China que se ha exportado a más de una docena de países, y que ya dejó un saldo de 213 personas muertas y casi 10.000 casos confirmados de contaminación.
La agencia de salud de la ONU define una emergencia internacional como un "evento extraordinario" que constituye un riesgo para otros países y requiere una respuesta internacional coordinada.
El subdirector de la Organización Panamericana de la Salud Jarbas Barbosa, explicó por medio de su cuenta de Twitter lo que significa la declaración de emergencia global.
China informó inicialmente a la OMS sobre casos del nuevo virus a finales de diciembre.
Los expertos dicen que hay abundante evidencia de que el virus se está extendiendo en China y han notado con preocupación situaciones en otros países, incluyendo Estados Unidos, Francia, Japón, Alemania, Canadá y Vietnam, donde se han dado casos aislados de transmisión de persona a persona.
El director de la OMS, Tedro Adhanom Ghebreyesus, dijo a los periodistas que le preocupa el contagio de personas fuera de China.
La principal razón de esta declaratoria de emergencia no es por lo que está ocurriendo en China sino por lo que sucede en otros países, dijo. “Nuestra principal preocupación es el potencial avance de este virus a países con sistemas de salud débiles y mal equipados para lidiar con la situación”.
“Esta declaración no es un voto de falta de confianza en China, al contrario. La OMS continúa confiando en China y su capacidad para controlar el brote”, agregó.
Francia informó este jueves que un doctor que estaba atendiendo a un paciente infectado con el nuevo virus, resultó contagiado. El doctor está ahora bajo tratamiento en una habitación de cuarentena en París. Los especialistas en brotes virales se preocupan de que la transmisión de nuevos virus de pacientes a doctores signifique que el virus se está adaptando a la transmisión humana.
Una declaratoria de Emergencia Mundial típicamente trae más dinero y recursos, pero también puede motivar a gobiernos nerviosos a restringir los viajes y el comercio con países afectados. El anuncio también impone más requisitos de reportar nuevos casos en los países afectados.
China reportó un aumento del saldo de muertes a 170 el jueves y más países reportaron infecciones, incluyendo algunos contagios locales, ocurridos cuando extranjeros siendo evacuados de las zonas afectadas en China regresaron a exámenes médicos e incluso aislamiento en sus países.
Rusia anunció el cierre de su frontera de más de 4,000 kilómetros con China, uniéndose así a los cierres anunciados por Mongolia y Corea del Norte, que cerraron sus fronteras para evitar contagios. Ya de hecho la frontera estaba cerrada por las festividades del Nuevo Año Lunar, pero las autoridades rusas dicen que el cierre se extenderá hasta el 1ro de marzo.
El tráfico de trenes entre Rusia y China está suspendido, excepto un tren que conecta a Moscú con Beijing, pero el tráfico aéreo entre ambos países continua, por ahora. Rusia no ha confirmado aún ningún caso del virus.
Mientras tanto, Estados Unidos y Corea del Sur confirmaron sus primeros casos de contagio de persona a persona. El hombre en Estados Unidos está casado con una mujer de Chicago que fue diagnosticada enferma con el virus tras regresar de un viaje a Wuhan, la ciudad China en el epicentro del brote.