El director ejecutivo de la Asociación Internacional de Entrenadores de Natación (World Swimming Coaches Association/WSCA), el estadounidense John Leonard, calificó de "sospechosa" la victoria de la nadadora Ye Shiwen, de 16 años, quien rebajó en 1 segundo y 2 centésimas el récord del mundo de los 400m combinado individual que poseía la australiana Stephanie Rice.
El triunfo de Ye había sido celebrado por la prensa oficial china, diciendo que "Lochte puede dar las gracias de que Ye Shiwen sea una mujer y no pueda competir contra él", según destacó la agencia oficial Xinhua.
Para Leonard, sin embargo, la hazaña de la China trae "malos recuerdos" de la nadadora irlandesa Michelle Smith, quien había ganado la misma prueba en los Juegos Olímpicos de Atlanta-1996 antes de dar positivo por dopaje en 1998 y ser suspendida por cuatro años.
Ye, por su parte, se defendió de la sospechas: "no hay problema de dopaje. El equipo chino tiene una política estricta", declaró la nadadora.
China respondió a través del jefe de su agencia antidopaje, Jiang Zhixue. "Los deportistas chinos, incluidos los nadadores, han superado cerca de 100 controles desde que llegaron aquí", declaró a la agencia de noticias Xinhua. "Muchos han sido sometidos a análisis de federaciones internacionales y de la Agencia Británica Antidopaje y no ha habido un solo caso positivo".
"Nosotros nunca hemos cuestionado a Michael Phelps cuando ganó ocho medallas de oro en Pekín hace cuatro años", continúo Jiang, que ha encontrado el respaldo del presidente de la comisión médica del Comité Olímpico Internacional (COI), Arne Ljungqvist.
Ljungqvist dijo tener " bastante experiencia en esta materia y desde hace 40 años participo en la lucha antidopaje de los JJOO. Si tengo alguna sospecha, en primer lugar, me la guardo para mí, y emprenderé alguna acción para averiguar si existe algo extraño o no. Si me preguntan en concreto por esta nadadora, digo que no. Por ahora no tengo ningún motivo para no aplaudir lo que ha conseguido".
Para los amantes de la estadística anecdótica, la adolescente nadadora china dejó un parcial de 28.93 segundos en los últimos 50 metros, en tanto que Ryan Lochte, en su final de la misma disciplina, marcó 29.10 a partir del último volteo.
Sólo tres centésimas más lenta que Lochte en los últimos 100 metros.
La sorprendente aceleración final de la nadadora china se refleja también en los últimos 100 metros, en los que sólo cedió tres centésimas a Lochte (58.68 frente a 58.65 del norteamericano).
El triunfo de Ye había sido celebrado por la prensa oficial china, diciendo que "Lochte puede dar las gracias de que Ye Shiwen sea una mujer y no pueda competir contra él", según destacó la agencia oficial Xinhua.
Para Leonard, sin embargo, la hazaña de la China trae "malos recuerdos" de la nadadora irlandesa Michelle Smith, quien había ganado la misma prueba en los Juegos Olímpicos de Atlanta-1996 antes de dar positivo por dopaje en 1998 y ser suspendida por cuatro años.
Ye, por su parte, se defendió de la sospechas: "no hay problema de dopaje. El equipo chino tiene una política estricta", declaró la nadadora.
China respondió a través del jefe de su agencia antidopaje, Jiang Zhixue. "Los deportistas chinos, incluidos los nadadores, han superado cerca de 100 controles desde que llegaron aquí", declaró a la agencia de noticias Xinhua. "Muchos han sido sometidos a análisis de federaciones internacionales y de la Agencia Británica Antidopaje y no ha habido un solo caso positivo".
"Nosotros nunca hemos cuestionado a Michael Phelps cuando ganó ocho medallas de oro en Pekín hace cuatro años", continúo Jiang, que ha encontrado el respaldo del presidente de la comisión médica del Comité Olímpico Internacional (COI), Arne Ljungqvist.
Ljungqvist dijo tener " bastante experiencia en esta materia y desde hace 40 años participo en la lucha antidopaje de los JJOO. Si tengo alguna sospecha, en primer lugar, me la guardo para mí, y emprenderé alguna acción para averiguar si existe algo extraño o no. Si me preguntan en concreto por esta nadadora, digo que no. Por ahora no tengo ningún motivo para no aplaudir lo que ha conseguido".
Para los amantes de la estadística anecdótica, la adolescente nadadora china dejó un parcial de 28.93 segundos en los últimos 50 metros, en tanto que Ryan Lochte, en su final de la misma disciplina, marcó 29.10 a partir del último volteo.
Sólo tres centésimas más lenta que Lochte en los últimos 100 metros.
La sorprendente aceleración final de la nadadora china se refleja también en los últimos 100 metros, en los que sólo cedió tres centésimas a Lochte (58.68 frente a 58.65 del norteamericano).