Siete parejas homosexuales y muchos de sus hijos solicitaron al estado de Nueva Jersey que reconozca los matrimonios homosexuales, siguiendo el reciente ejemplo histórico que dejo la semana pasada el vecino estado de Nueva York, que se convirtió en el sexto estado de EE.UU. en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Pero no es el único, también Rhode Island se sube a la ola de aprobaciones.
En 2007, el estado de Nueva Jersey aprobó una ley de uniones civiles para responder a la demanda de la Suprema Corte para que las parejas homosexuales comprometidas recibieran las mismas protecciones y beneficios legales que las parejas heterosexuales casadas. Sin embargo, las inquietudes sobre esa ley ha ido creciendo debido a ciertas desigualdades que todavía perduran.
Como ejemplo, los demandantes citan las oficinas de seguros y habitaciones de emergencia en hospitales donde se aplican los derechos matrimoniales, la ley de uniones civiles no aplica.
También criticaron la situación de las lesbianas que tuvieron que pagar miles de dólares para que la madre que no dio a luz adoptara a su hijo; parejas que han tenido que cargar carpetas con documentos legales para avalar sus relaciones en caso de emergencia. No estar casados, dicen, hace que sus hijos se pregunten por qué la sociedad no valora a sus familias tanto como a las otras.
Aprobación en Rhode Island
El Senado de Rhode Island aprobó las uniones civiles entre parejas del mismo sexo a la espera de que esa medida se convierta en ley por el gobernador Lincoln Chafee, según informó su oficina.
Rhode Island sigue a Nueva York, que se convirtió en el sexto estado en permitir las uniones gay, uniéndose a Iowa, Massachusetts, Vermont, Nueva Hampshire, Connecticut y al Distrito de Columbia.
Por el momento, existen otras medidas para las uniones civiles o asociaciones domésticas, como las promulgadas en Illinois, Delaware y Hawaii.