El presidente Donald Trump planea suspender los críticos pagos a las aseguradoras ordenados por la ley de salud de Barack Obama, en una medida que agitará los mercados de seguros y posiblemente afectará a millones de personas de bajos ingresos que dependen de ellos para obtener cobertura.
Dos personas al tanto de la decisión describieron el plan el jueves por la noche, y solicitaron el anonimato porque carecen de autorización para hablar públicamente sobre el asunto.
En un comunicado, la Casa Blanca afirmó que el gobierno ya no puede seguir pagando legalmente los así llamados subsidios para compartir costos — los cuales ascienden a $7.000 millones de dólares este año— porque carecen de autorización formal del Congreso.
Los subsidios ayudan a reducir los copagos y los deducibles que tienen que erogar las personas de bajos ingresos.
El gobierno ha estado efectuando los pagos mes tras mes, incluso después de que Trump amenazó con suspenderlos para obligar a los demócratas a negociar sobre el Obamacare.
Probablemente la acción del mandatario desate una demanda de los secretarios de Justicia de los estados, quienes argumentan que los subsidios a las aseguradoras están totalmente autorizados bajo la ley federal, y que la posición de Trump es imprudente.
La revelación de las intenciones de Trump coincidieron con la firma de un decreto en el que el presidente Trump ordena a las agencias gubernamentales que diseñen planes de seguros que ofrezcan primas más bajas por fuera de los requisitos de la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible promulgada por el presidente Obama.
Frustrado por los reveses que ha sufrido en el Congreso en torno a este tema, Trump decidió recurrir a una orden ejecutiva para llevar el debate sobre “revocar y reemplazar” el Obamacare a un punto en el que no haya otra opción que tomar una decisión al respecto.
Se espera que el anunció de la decisión del presidente se haga este viernes, junto con el anuncio de la "descertificación" del pacto nuclear iraní.
