El presidente Barack Obama, hablando desde Martha’s Vineyard donde se encuentra de vacaciones, lamentó la ejecución de James Foley a manos del Estado Islámico y advirtió que Estados Unidos seguirá haciendo lo que sea necesario para proteger a sus ciudadanos.
“Jim nos fue arrebatado en un acto de violencia que desafía, que conmociona la conciencia del mundo entero”, dijo Obama, agregando que había hablado con su familia para ofrecerles sus condolencias.
El mandatario aseguró que Estados Unidos hará “lo que tenga que hacer” para proteger sus intereses y su gente.
“Estaremos vigilantes y seremos implacables. Cuando hay gente que daña a estadounidenses en cualquier parte del mundo, hacemos lo necesario para ver que se haga justicia”, agregó.
Obama reiteró su llamado a que el pueblo iraquí se una para expulsar a los extremistas de sus comunidades y dijo que la gente de Siria, “cuya historia contó Jim, tampoco merecen vivir bajo la tiranía de terroristas”.
A todos ellos les ofreció apoyo continuado.
El mandatario también urgió a los demás países de la región a trabajar unidos para “expulsar este cáncer y rechazar claramente a estas ideologías nihilistas”.
“Algo en lo que podemos estar de acuerdo, es que un grupo como [el Estado Islámico] no tiene espacio en el siglo 21”, remarcó.
