El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirma que comprende la frustración de los hispanos por las dificultades económicas de los últimos dos años, pero les instó a votar en las elecciones legislativas para evitar un retroceso.
"La comunidad hispana, al igual que el resto el país, ha atravesado dos años muy difíciles. Entiendo que la gente se sienta frustrada", señaló Obama ante el temor de que la oposición republicana gane votos en este colectivo.
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"No podemos retroceder. Hay mucho trabajo por hacer en empleos, economía, y en la reforma migratoria", afirmó el mandatario. El masivo voto hispano en las presidenciales de 2008 "nos ayudó a lograr el cambio. Yo no lo puedo hacer solo”, agregó.
Obama recordó que su gobierno ha logrado aprobar otras reformas, como la del sistema de salud, la del sistema educativo y recortes impositivos, mientras que los republicanos tienen "la plataforma del 'No se puede' (en español)".
En uno de sus mensajes en español, Obama advirtió a los hispanos de que no se olvidaran de “quién está con ustedes y quién en su contra".
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El presidente se comprometió a seguir impulsando la reforma migratoria integral que abra una vía para regularizar la situación de 11 millones de indocumentados que viven en Estados Unidos, la gran mayoría de ellos latinoamericanos.
Republicanos apuntan a bastiones demócratas
Clásicos bastiones demócratas podrían rendirse a los republicanos, que lanzan su campaña más allá de sus propias fronteras.
El republicano Jeff Perry amenaza con quedarse con una banca legislativa en poder de los demócratas desde hace casi 40 años en una de un centenar de consultas electorales que estima que al menos 75 bancas −la mayoría de ellas demócratas− podrían cambiar de manos en las elecciones legislativas.
Otras 25 batallas en las que los demócratas llevaban las de ganar parecen ahora más reñidas y no se descarta que pasen al bando republicano.
En Nueva York, donde los demócratas son dueños de 28 de las 29 bancas de ese estado, los republicanos aspiran a arrebatar hasta ocho escaños demócratas.
En un reflejo de los problemas que enfrentan los demócratas, el presidente Barack Obama se está presentando en actos de políticos de su partido que luchan por preservar sus bancas en lugar de concentrarse exclusivamente en las batallas en las que los demócratas intentan arrebatarle un asiento a los republicanos.