La declaración se produce cuando el país comunista aislado aumenta las tensiones con Estados Unidos y Corea del Sur. Esta semana, Corea del Norte anunció que cortaría todos los canales de comunicación con el Sur y emitió una amenaza velada para interferir en las elecciones presidenciales de noviembre de Estados Unidos.
En un comentario publicado el viernes en la Agencia de Noticias Central de Corea (KCNA), el ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Ri Son Gwon, dijo que la esperanza de paz en la península coreana "se ha desvanecido en una oscura pesadilla" y que la situación está "tomando diariamente un giro para peor".
“La pregunta es si será necesario seguir tomados de la mano en Singapur, ya que vemos que no hay nada de mejora en los hechos en la RPDC-EE.UU. relaciones simplemente manteniendo relaciones personales entre nuestro Liderazgo Supremo y el Presidente de los Estados Unidos", afirmó Ri. El nombre oficial de Corea del Norte es la República Popular Democrática de Corea (RPDC).
En su cumbre de Singapur en junio de 2018, Trump y Kim firmaron una breve declaración acordando "trabajar para completar la desnuclearización de la península de Corea". Las dos partes nunca acordaron qué significaba esa frase o cómo comenzar a implementarla, incluso después de dos reuniones de seguimiento entre Trump y Kim.
Conversaciones estancadas
A pesar de las conversaciones estancadas, Trump a veces ha retratado su diplomacia de Corea del Norte como una victoria en política exterior, señalando que su relación con Kim sigue siendo fuerte y que Pyongyang no ha realizado recientemente ninguna prueba de misiles nucleares o de largo alcance.
Corea del Norte a menudo se ha irritado ante esos comentarios. En su declaración del viernes, el ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte acusó a Trump de centrarse solo en anotar puntos políticos internos.
"En retrospectiva, todas las prácticas de la actual administración estadounidense hasta el momento no son más que la acumulación de sus logros políticos", dijo Ri. "Nunca más le proporcionaremos al director ejecutivo de EE. UU. otro paquete para ser utilizado para logros sin recibir ninguna devolución".
Las conversaciones nucleares se estancaron desde que Trump y Kim no lograron llegar a un acuerdo en su cumbre de febrero en Hanoi, Vietnam, el año pasado. Corea del Norte quería que Estados Unidos relajara las sanciones a cambio del desmantelamiento parcial de sus instalaciones nucleares; Trump quería que Kim aceptara renunciar a todo su programa nuclear. Las conversaciones a nivel de trabajo se reanudaron en octubre y terminaron sin éxito sin avanzar en la desnuclearización.
Un funcionario del Departamento de Estado dijo el jueves al Servicio Coreano de VOA que Estados Unidos sigue comprometido a involucrar a Corea del Norte "en negociaciones significativas para que los norcoreanos puedan lograr un futuro más brillante".
“Esa oferta permanece sobre la mesa. Estamos dispuestos a adoptar un enfoque flexible para llegar a un acuerdo equilibrado sobre todos los compromisos de la cumbre de Singapur”, dijo el funcionario.
Programa nuclear continúa
Aunque Corea del Norte se ha abstenido de realizar pruebas nucleares, continúa desarrollando armas nucleares. Según algunas estimaciones, Corea del Norte ahora tiene material suficiente para unas 40 bombas nucleares.
Desde mediados del año pasado, Corea del Norte también ha probado múltiples sistemas de armas nuevos, incluidos misiles balísticos de corto alcance que representan una gran amenaza para los aliados de EE. UU. en la región.
En comentarios a principios de año, Kim dijo que el mundo pronto sería testigo de una "nueva arma estratégica".
El ministro de Relaciones Exteriores Ri no hizo ninguna amenaza específica en sus comentarios del viernes, pero señaló que el "objetivo estratégico seguro de la RPDC es construir una fuerza más confiable para hacer frente a las amenazas militares a largo plazo de los Estados Unidos".
Tensiones intercoreanas
Corea del Norte también ha estado generando una crisis diplomática con Corea del Sur.
Esta semana, Corea del Norte anunció que detendría todos los canales de comunicación con el Sur, al que se refirió como su "enemigo".
Como aparente pretexto para su decisión, Corea del Norte citó actividades recientes de activistas surcoreanos.
