Representantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) exhortaron a los jóvenes de todo el mundo a dominar los deseos de salir a fiestar y a otras aglomeraciones para ayudar a impedir nuevos brotes de COVID-19.
Durante una sesión virtual de preguntas y respuesta en la sede de la OMS en Ginebra, Suiza, el director de emergencias de salud, Mike Ryan y la epidemióloga María Van Kerkhove dijeron que los jóvenes tienen que jugar su papel para frenar la expansión del coronavirus.
Los países de todo el mundo, incluso los que mantenían relativamente el virus bajo control, han visto un repunte de casos en focos de vida nocturna, bares y otras áreas atractivas para la juventud.
Esto se ha visto mucho más en el hemisferio Norte, donde es verano y los jóvenes están hastiados de confinamientos y ansiosos de disfrutar las actividades de la estación, señalaron los especialistas.
Ryan dijo que la gente joven tiene que preguntarse si en realidad necesitan ir a una fiesta. Los jóvenes, dijo, tienen “una inmensa oportunidad de reducir las transmisiones con su comportamiento”.
El virus “se transmite en cúmulos, le gustan las personas reunidas”, explicó Van Kerkhove, y, si está presente, se transmitirá de persona a persona cada vez que las comunidades le ofrezcan la oportunidad.
Los expertos de la OMS han registrado un aumento de los casos entre personas de edad universitaria en otros puntos de reunión, como eventos deportivos, e insisten que deben seguir respetando el distanciamiento físico.
Lo que no ha sido ampliamente discutido, añadió Van Kerkhove, es que no todos los que tienen el virus se lo pasan a alguien. Solo entre el 10 y el 20 por ciento de los casos son responsables de alrededor del 80% de las transmisiones.
Las reuniones proporcionan a esos “propagadores” el mejor escenario para transmitir el virus a muchas personas.