El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro denunció al gobierno estadounidense de querer iniciar “un proceso de descuartizamiento en Venezuela” y comparó los actos violentos ocurridos en su país con lo que está sucediendo en Siria, Irak o Ucrania.
De esta manera Maduro afirmó que fue el gobierno de EE.UU. el que financió los grupos violentos, llamados “guarimbas”, y apoyó a los líderes opositores como Leopoldo López para crear un estado de caos en el país como “estrategia de división de pueblos”.
Por otro lado el gobierno de Estados Unidos ha reitereado que está dispuesto a mejorar las relaciones bilaterales con Venezuela e incluso la secretaria de Estado adjunta para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson aclaró durante la Asamblea General de la ONU que el apoyo a López representa el respaldo a los derechos fundamentales de todos los venezolanos y que no es un apoyo a la agenda política opositora.
Durante el acto de conmemoración del noveno aniversario del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional, Maduro explicó que las características de los conflictos en el Medio Oriente son las mismas que la extrema derecha trató de implementar en Venezuela.
Al mismo tiempo resaltó que gracias a las Fuerzas Armadas Venezolanas y al pueblo se logró la paz y pudieron mantenerse firme a las enseñanzas de Hugo Chávez y sus principios de patria y unidad.