El sector de exportadores de Nicaragua teme que el endurecimiento del confinamiento en los principales socios comerciales, que ya ha cerrado bares, restaurantes y cafeterías, dañe los precios de los productos nicaragüenses en los mercados internacionales.
Según el presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua, Guillermo Jacoby, “cuando eso sucede hay una reducción en términos de los pedidos en generales. Y no solamente de los pedidos, sino que por la misma falta de consumo bajan los precios a nivel mundial”.
Las exportaciones, el turismo, las remesas y la inversión extranjera serían los sectores más afectados, que llevarían al Producto Interno Bruto a una caída de hasta un 3,9% en 2020, alerta la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social, a través de Álvaro López, uno de sus economistas.
“Nosotros habíamos proyectado una contracción para este año del 1,1. Ahorita nuestras proyecciones más negativas andan del 3,9 para este año”, dijo López a la Voz de América.
De momento no puede definirse cuál será el nivel de daño en cada una de esas actividades, ya que este dependerá de las consecuencias que la pandemia provoque a la economía global, algo que quedará definido por el giro que esta tome en las próximas semanas.
López considera que estás proyecciones podrían empeorar.
“Sí, probablemente aumenten. Dadas las proyecciones de firmas internacionales, han dado nuevos escenarios de cómo se va a comportar la pandemia y la economía mundial. Las proyecciones se han estado revisando y tienden a ir a la baja. Todavía el impacto va a ser mayor”, advirtió.
Igualmente habría efectos en las remesas familiares, lo que dañaría la balanza de pagos, que financia parte del déficit de la cuenta comercial de Nicaragua.
Del total de remesas del exterior, que ascendió a 1.501 millones de dólares en 2018, el 60 por ciento provino de Estados Unidos, uno de los países fuertemente afectados por el coronavirus.
En 2019, Nicaragua exportó un equivalente de más de 2 millones 777 dólares en productos, 161 millones de dólares más que en 2018, pero este año las perspectivas son muy desalentadoras para los exportadores nicaragüenses, pese a que aún las fronteras para el tránsito de mercancías en el mundo no han sido cerradas.
Los exportadores temen que lo vivido en la recesión de 2009 se repita con la actual crisis mundial.
En ese año, los precios internacionales bajaron fuertemente. Según estadísticas del Centro de Trámites de Exportaciones, los precios de todos los productos cayeron un 9,9 por ciento comparado con 2008, cuando estalló la crisis financiera mundial.
Esto ocurre en momentos en que la economía local atraviesa su tercer año de recesión, tras caídas de 3,8 y 5,4 por ciento en los dos últimos años.
Y también anticipa, según los expertos, que se incrementará aún más el desempleo y la pobreza en el país.