La agencia espacial de EE.UU, la NASA, envió este sábado dos sondas gemelas al espacio en una misión exploratoria destinada a obtener más información sobre la corteza y el núcleo de la Luna.
El despegue de las dos naves no tripuladas, Grail-A y Grail-B, tuvo finalmente efecto luego de haber sido aplazado en dos ocasiones, primero el jueves por malas condiciones atmosféricas, y luego el viernes por una falla en el sistema de propulsión.
Las sondas, propulsadas por un pequeño cohete Delta II, demorarán hasta fines de año en llegar a la Luna, algo que se calculó de esa manera para abaratar la misión, que aún así costará unos $496 millones de dólares.
Según lo previsto la misión Grail durará hasta mayo del año próximo y las sondas no alunizarán sino que permanecerán orbitando el satélite de la Tierra a unos 55 kilómetros de su superficie,
Cuatro cámaras a bordo de cada una de ellas permitirán a los astrónomos tomar las fotografías que deseen, y según dijo la NASA ayudarán a estudiar mejor que nunca la Luna.
Ed Weiler, de la dirección de misiones científicas de la agencia, indicó que con las sondas será posible trazar el campo gravitatorio de la Luna “con 100 a 1.000 veces mayor precisión que antes".
La idea es mejorar las estimaciones que se tienen hasta ahora para en caso de que se vuelva a enviar nuevamente a un hombre a la Luna.
Grail es la misión lunar número 110 de las realizadas por EE.UU., la ya desaparecida Unión Soviética, Japón, China e India. La más trascendental fue la Apolo 11 de la NASA en 1969, la primera misión tripulada en pisar la superficie de la Luna.