O cumple el gobierno o se acaba el diálogo, es la postura de la Mesa de la Unidad (MUD) en la reunión que sostendrán este domingo con los cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
La reunión, prevista para las 3:00 de la tarde, contará con las presencia de los cancilleres de Brasil, Luiz Alberto Figuereido; de Colombia, María Ángela Holguín; y de Ecuador, Ricardo Patiño.
La misión de Unasur tenía previsto llegar a Venezuela la semana pasada pero se abstuvo ante la decisión del MUD de congelar el diálogo con el gobierno debido a la “falta de resultados” y a la política represiva de los cuerpos policiales, que esta semana disolvieron una manifestación y detuvieron a otro centenar de estudiantes.
El secretario ejecutivo de la alianza opositora, Ramón Guillermo Aveledo advirtió en Twitter, que “el diálogo no es una peña. Hay que producir resultados”.
De igual manera se pronunció Roberto Enríquez, presidente del partido Copei, que lamentó que nada de lo que se acordó en presencia de los cancilleres y el nuncio apostólico, facilitadores en la primera ronda de negociaciones, se haya cumplido.
El presidente Nicolás Maduro dijo el sábado en cadena nacional que la oposición y la ultraderecha mantienen un plan para dar un golpe de Estado y llenar de violencia al país.
Hizo un llamado a la MUD a condenar “todos estos actos violentos y asesinos, para que sigamos construyendo caminos de paz”.
La MUD asegura que el diálogo está en crisis no por los acuerdos que faltan, sino por los que se alcanzaron ya pero se están desconociendo, como la revisión de la lista de presos políticos y exiliados y su liberación, especialmente la del comisario Iván Simonovis.
La reunión, prevista para las 3:00 de la tarde, contará con las presencia de los cancilleres de Brasil, Luiz Alberto Figuereido; de Colombia, María Ángela Holguín; y de Ecuador, Ricardo Patiño.
La misión de Unasur tenía previsto llegar a Venezuela la semana pasada pero se abstuvo ante la decisión del MUD de congelar el diálogo con el gobierno debido a la “falta de resultados” y a la política represiva de los cuerpos policiales, que esta semana disolvieron una manifestación y detuvieron a otro centenar de estudiantes.
El secretario ejecutivo de la alianza opositora, Ramón Guillermo Aveledo advirtió en Twitter, que “el diálogo no es una peña. Hay que producir resultados”.
De igual manera se pronunció Roberto Enríquez, presidente del partido Copei, que lamentó que nada de lo que se acordó en presencia de los cancilleres y el nuncio apostólico, facilitadores en la primera ronda de negociaciones, se haya cumplido.
El presidente Nicolás Maduro dijo el sábado en cadena nacional que la oposición y la ultraderecha mantienen un plan para dar un golpe de Estado y llenar de violencia al país.
Hizo un llamado a la MUD a condenar “todos estos actos violentos y asesinos, para que sigamos construyendo caminos de paz”.
La MUD asegura que el diálogo está en crisis no por los acuerdos que faltan, sino por los que se alcanzaron ya pero se están desconociendo, como la revisión de la lista de presos políticos y exiliados y su liberación, especialmente la del comisario Iván Simonovis.