Los gobiernos de Irán y Rusia censuraron nuevas sanciones impuestas a los sectores financieros, petroquímicos y energéticos iraníes, calificándolas de ilegales e inútiles.
Estados Unidos, Canadá y Gran Bretaña anunciaron individualmente nuevas sanciones el lunes 21 de noviembre, para aumentar la presión económica contra Irán en respuesta a las preocupaciones internacionales sobre su programa nuclear.
Por su parte, el portavoz de la cancillería iraní, Ramin Mehmanparast, dijo que las medidas unilaterales por parte de los tres países equivalen solo a propaganda y guerra sicológica, ya que los vínculos comerciales entre estos países son mínimos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia calificó las sanciones de inaceptables y contradictorias a la ley internacional.
A pesar de que los representantes de Rusia y China en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas bloquearon más medidas similares, cuatro rondas de sanciones contra Irán fueron aprobadas.