Corea del Norte y Corea del Sur realizaron el lunes reuniones de alto nivel para hablar sobre cómo proseguirán, en medio de un esfuerzo diplomático mundial para que las negociaciones sobre las armas nucleares de Corea del Norte salgan de su punto muerto.
Corea del Sur dijo que las negociaciones del lunes tienen la meta de llegar a los acuerdos de paz que se anunciaron tras la cumbre del mes pasado entre el presidente surcoreano Moon Jae-in y el líder norcoreano Kim Jong Un en la capital de Corea del Norte, Pyongyang.
La reunión entre funcionarios de alto nivel ocurre en un momento delicado, mientras Washington ha dicho sentirse incómodo por la rapidez del ritmo de interacción entre las Coreas, que dice debe de ir al ritmo de los esfuerzos estadounidenses para desnuclearizar a Corea del Norte.
El ministro de Unificación de Corea del Sur, Cho Myoung-gyon, dijo que algunas de las discusiones abordarán cómo organizar una inspección conjunta de un tramo ferroviario de Corea del Norte que las Coreas planean conectar con Corea del Sur.
El jefe de la delegación norcoreana en la reunión es Ri Son Gwon, presidente de la agencia norcoreana encargada de asuntos intercoreanos.
También podría haber discusiones sobre detalles de una comisión militar conjunta acordada entre sus líderes para evaluar pasos para reducir tensiones y mantener la comunicación abierta a fin de evitar crisis y enfrentamientos accidentales.
“Las aguas infinitas del Pacífico y el Atlántico derivan de pequeñas vertientes de agua”, dijo Ri a la prensa surcoreana al llegar a la aldea fronteriza de Panmunjom para la reunión.
“De la misma manera, la reunión de alto nivel de hoy contribuirá a la paz, prosperidad y unificación (entre ambos países) que es deseada por toda la nación”, agregó Ri, refiriéndose a ambos países.
El la tercera cumbre que tuvieron este año, Moon y Kim se comprometieron a reanudar la cooperación económica en cuanto sea posible, mostrándose optimistas de que las sanciones internacionales podrían llegar a su fin y permitir tal iniciativa, y a realizar una ceremonia para iniciar a fines de año un proyecto ambicioso para conectar sus carreteras y vías ferroviarias.