Millones de estadounidenses que han permanecido sin empleo por un largo periodo dejarán de recibir su cheque de subsidio por desempleo a partir de la próxima semana.
Este viernes caduca el programa federal que extiende los beneficios de desempleo.
Eso significa que aquellas personas que están sin trabajo por más de 26 semanas dejarán de recibir su cheque de por lo menos $300 dólares semanales.
Se estima que este cambio afecte a 1.3 millones de estadounidenses, que según los expertos pertenecen al grupo de los desempleados crónicos o que han estado sin trabajo por más de seis meses.
Durante la llamada “Gran Recesión”, el Congreso ofreció beneficios de desempleo hasta por más de 90 semanas, en algunos estados se limitó a 73, pero a partir de este viernes cualquier persona que permanezca sin trabajo por más de 26 semanas ya no recibirá nada.
La extensión de este benefició no forma parte del presupuesto bipartidista que aprobó el Congreso y promulgó el presidente Barack Obama.
Este beneficio le cuesta a las arcas del gobierno $25.000 millones de dólares y particularmente la Cámara de Representantes no quiso incluir el beneficio sino viene de la mano con una fórmula para pagarlo que incluya recortes.
El Senado tiene una pieza legislativa bipartidista para extender los beneficios por tres meses, pero es considerado solo un alivio temporal.
El presidente Obama prometió firmarlo, pero antes deberá ser debatido en el Congreso apenas se reincorporen los legisladores de las vacaciones por la temporada navideña.
Si bien es aprobada en el Senado su futuro sería incierto en la Cámara de Representantes liderada por los republicanos, pero los demócratas continuarán con la presión.
Este viernes caduca el programa federal que extiende los beneficios de desempleo.
Eso significa que aquellas personas que están sin trabajo por más de 26 semanas dejarán de recibir su cheque de por lo menos $300 dólares semanales.
Se estima que este cambio afecte a 1.3 millones de estadounidenses, que según los expertos pertenecen al grupo de los desempleados crónicos o que han estado sin trabajo por más de seis meses.
Durante la llamada “Gran Recesión”, el Congreso ofreció beneficios de desempleo hasta por más de 90 semanas, en algunos estados se limitó a 73, pero a partir de este viernes cualquier persona que permanezca sin trabajo por más de 26 semanas ya no recibirá nada.
La extensión de este benefició no forma parte del presupuesto bipartidista que aprobó el Congreso y promulgó el presidente Barack Obama.
Este beneficio le cuesta a las arcas del gobierno $25.000 millones de dólares y particularmente la Cámara de Representantes no quiso incluir el beneficio sino viene de la mano con una fórmula para pagarlo que incluya recortes.
El Senado tiene una pieza legislativa bipartidista para extender los beneficios por tres meses, pero es considerado solo un alivio temporal.
El presidente Obama prometió firmarlo, pero antes deberá ser debatido en el Congreso apenas se reincorporen los legisladores de las vacaciones por la temporada navideña.
Si bien es aprobada en el Senado su futuro sería incierto en la Cámara de Representantes liderada por los republicanos, pero los demócratas continuarán con la presión.