El Departamento de Justicia de Estados Unidos pidió a una corte de apelaciones que levante la orden judicial emitida por un juez federal en Texas, que detiene la acción ejecutiva del presidente Barack Obama que protege de la deportación a algunos inmigrantes ilegales.
En su moción de emergencia de 21 páginas, presentada el jueves en la Corte de Apelaciones de 5to. Circuito en Nueva Orleans, el Departamento de Justicia califica el interdicto como "sin precedente y equivocado".
De igual manera, argumenta que es crucial suspenderlo, ya que "interfiere irreparablemente con la capacidad (del Departamento de Seguridad Nacional) de proteger la nación y asegurar nuestras fronteras".
La orden judicial del juez de Texas estaba destinada a detener temporalmente la orden del presidente para impedir la deportación de unos 5 millones de personas que residen ilegalmente en el país, mientras las cortes presentan juicios contra la acción del presidente.
Veintiséis estados de Estados Unidos demandaron al gobierno federal, diciendo que el presidente Obama sobrepasó su autoridad, pero otra coalición de 14 estados, incluidos California y Iowa, así como el Distrito de Columbia, presentaron el jueves una moción ante el Tribunal del Quinto Circuito en apoyo a la suspensión del interdicto.
Argumentaron que las acciones sobre inmigración beneficiarán a los estados a través de mayores ingresos fiscales y mejor seguridad pública..
Obama dice que sus órdenes son legales y que fue forzado a actuar porque el Congreso no aprobó una reforma migratoria.
Por su parte, el secretario de Justicia de Texas, Ken Paxton, dijo en un comunicado que "el uso inconstitucional del poder ejecutivo por parte del presidente Obama para conseguir lo que no pudo hacer en el Congreso establece un precedente peligroso que amenaza el tejido de nuestra república".
Paxton advirtió que el estado de Texas y la coalición bipartidista de otros 25 estados "continuarán oponiéndose a las acciones unilaterales e ilegales del presidente".
