El canciller mexicano Marcelo Ebrard dijo el viernes que se ha completado el apostamiento de unos 6.000 efectivos de la Guardia Nacional para controlar el flujo de migrantes centroamericanos hacia Estados Unidos.
Añadió que la agencia de inmigración ha llenado 650 puestos para ayudar a regular los cruces en el sur.
México prometió a Estados Unidos este mes que reduciría el número de migrantes que llegan a la frontera para evitar la aplicación de aranceles sobre las exportaciones según la amenaza del presidente Donald Trump.
Se ha visto a efectivos de la Guardia Nacional en los estados sureños, donde ayudan a las autoridades de inmigración en los retenes, pero no en grandes contingentes.
Las autoridades dicen que han apostado a la guardia en una amplia franja del territorio, pero sin entrar en detalles.