El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo el viernes que el derecho de otorgar asilo debe ser respetado tras el conflicto diplomático desatado por el refugio que su país otorgó a aliados del expresidente boliviano Evo Morales en su embajada en La Paz.
Un día antes México anunció que acudirá a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para que el gobierno interino de Bolivia cese el “asedio” que lleva a cabo desde hace días a su sede diplomática en ese país, donde nueve excolaboradores de Morales aguardan salvoconductos.
“No se puede violar el derecho internacional, se tiene que garantizar el derecho de asilo y esperemos que se actúe con sensatez y que no vayan a invadir nuestra representación diplomática”, aseguró el mandatario mexicano en su tradicional conferencia de prensa matutina.
“Vamos a hacer honor a lo que ha significado siempre nuestra política exterior, que ha sido ejemplo mundial en garantizar el derecho de asilo”, añadió, al tiempo que expresó su solidaridad con el personal mexicano en Bolivia.
México ha calificado como exagerado el incremento de la vigilancia policial alrededor de su sede diplomática en La Paz, luego de que López Obrador otorgó en noviembre asilo político a Morales y a excolaboradores.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, aseguró el jueves que el gobierno interino de Jeanine Añez, una exsenadora que asumió el poder tras la renuncia de Morales a la presidencia, emitió ordenes de captura a cuatro de los asilados cuando México ya les había dado refugio y había iniciado los trámites para darles los salvoconductos.
Las autoridades bolivianas, por su parte, respondieron el anuncio de México de recurrir a la Corte Internacional de Justicia como “una falacia jurídica”, argumentando que no se puede instaurar una demanda por hechos no probados o por presunciones.