En medio de las reuniones bilaterales de alto nivel entre ministros estadounidenses y mexicanos, el anuncio del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) que da paso a la construcción del muro fronterizo en la frontera suroeste generó rechazo del presidente Andrés Manuel López Obrador el jueves.
“Esa autorización para la construcción del muro es un retroceso porque eso no resuelve el problema”, dijo López Obrador en su conferencia de prensa mañanera, en referencia a la dispensa otorgada por el DHS a 26 leyes federales para permitir la construcción de muro fronterizo en el sur de Texas.
Se trataría de la primera vez que la administración de Joe Biden hace uso del poder ejecutivo para determinar que existe “una necesidad de construir barreras” para evitar el cruce ilegal de migrantes, una estrategia que había sido usada por Donald Trump.
“Yo mañana voy a hablar del tema de esta propuesta que se dio a conocer el día de ayer para permitir la construcción de un muro en la frontera, que es contrario a lo que venía sosteniendo el presidente Biden. Es hasta ahora el único presidente que no ha construido muro”, agregó López Obrador.
Biden, por su parte, se expresó el jueves sobre las nuevas secciones del muro que serían agregadas, asegurando que es una acción que no puede detener. Biden dijo que intentó que el Congreso reasignara los fondos para los muros promocionados por su predecesor, pero que por ley no podía redirigir el dinero.
"No puedo detener eso", dijo. Cuando se le preguntó si un muro fronterizo funciona, dijo a los periodistas: "No".
Trump tomó el anuncio para exigir una “disculpa” por parte de la administración Biden por haberle criticado sus esfuerzos. "Como he dicho a menudo, durante miles de años, sólo hay dos cosas que han funcionado consistentemente: ¡las ruedas y las paredes!" Trump escribió en las redes sociales. "¿Joe Biden se disculpará conmigo y con Estados Unidos por tardar tanto en ponerse en movimiento...?".
Mayorkas: una precisión necesaria
Más tarde el jueves, el Secretario de Seguridad Nacional de EEUU, Alejandro Mayorkas, precisó en una declaración pública que no se trata de “una nueva política” por parte de la Casa Blanca respecto al muro.
“Desde el primer día, esta Administración ha dejado claro que un muro fronterizo no es la respuesta. Ésa sigue siendo nuestra posición y nuestra posición nunca ha flaqueado. El lenguaje del aviso del Registro Federal está siendo sacado de contexto y no significa ningún cambio en la política”, manifestó.
Mayorkas explicó que se trata de fondos asignados a este propósito desde 2019 bajo la administración del presidente republicano Donald Trump y que el gobierno de Biden le ha insistido al Congreso para que rescinda el dinero, pero “no lo ha hecho y estamos obligados a cumplir la ley”.
“Esta Administración cree que una seguridad fronteriza eficaz requiere un enfoque más inteligente e integral, que incluya tecnología de vigilancia fronteriza de última generación y puertos de entrada modernizados”, concluyó el secretario Mayorkas.
Trabajo conjunto EEUU-México
El anuncio se realizó el mismo día en que Mayorkas y Antony Blinken, secretario del Departamento de Estado, viajaron a México junto a una delegación de funcionarios de la Casa Blanca para la segunda edición del Diálogo de Seguridad de Alto Nivel entre Estados Unidos y México.
En esta, según se anticipó, discutirán temas migratorios y de manejo del narcotráfico. Las reuniones están pautadas a continuar el jueves con encuentros entre los secretarios y López Obrador, así como con la Secretaria de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena.
“Juntos, continuamos nuestro trabajo para abordar las amenazas que enfrentamos a lo largo de nuestra frontera compartida mejorando la seguridad de nuestros puertos de entrada, acelerando el movimiento del comercio y los viajes legales y desmantelando las despiadadas redes criminales y las cadenas de suministro de las que dependen”, dijo Mayorkas a su llegada a través de una publicación en redes sociales.
López Obrador, por su parte, abundó en que ambas delegaciones discutirían el desarrollo de América del Norte, el tratado comercial, als inversiones para México y la atención económica en América Latina y el Caribe “para enfrentar el problema de la migración”.
“Promesas incumplidas”
En un comunicado el mismo jueves, el grupo Alianza Américas rechazó de plano el anuncio de la ampliación del muro de 12 millas (unos 19 km) a lo largo de la frontera y cuestionó la aplicación de las 26 normas anunciadas el día antes.
“La administración Biden-Harris se comprometió desde la campaña presidencial a suspender la construcción del muro fronterizo por considerar que es una estrategia ineficaz para controlar los flujos fronterizos”, rememoró en un comunicado la organización con sede en Chicago.
Estratégicamente, valora Alianza Américas, es un proyecto fallido si quiere frenar las acciones de los contrabandistas y criminales. “El tráfico de fentanilo y el ingreso no autorizado de personas a través de la frontera sur de EEUU no se controlan con estrategias medievales”, aseveró.
Una mirada "humanitaria"
“Las amenazas que enfrentan nuestras comunidades no pueden ser abordadas por un solo país. Nuestros desafíos compartidos requieren soluciones compartidas”, apuntó Blinken en redes sociales al llegar a territorio mexicano.
Mientras tanto, de manera paralela, también en Ciudad de México estuvo el alcalde de Nueva York, Eric Adams. En una conferencia con la directora de una empresa de comunicaciones, abundó en la crisis migratoria que vive su ciudad.
“Es una preocupación real”, apuntó Adamas, quien aseguró que se debe atender la ola de migrantes con una mirada “humanitaria” y el impacto que “en los negocios”.
Cerca de las dos de la tarde hora local de Ciudad de México, Blinken y Bárcena ofrecerán una conferencia de prensa en la que detallarán los acuerdos encontrados durante las reuniones.
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