El gobierno de México levantó una alerta epidemiológica por la gripe porcina, ante la disminución de la mortalidad y frecuencia de circulación del virus de la influenza A H1N1.
El secretario de Salud, José Angel Córdova, declaró que a pesar del levantamiento de la alerta que mantuvo por 14 meses, se mantendrá la vigilancia epidemiológica para detectar cualquier anormalidad.
Con el establecimiento de la alerta epidemiológica, las autoridades mexicanas aceleraron los trámites para la adquisición de medicamentos para enfrentar el virus, por lo que al ser levantada se restablecen los procesos normales para obtenerlos.
Córdova informó que hasta octubre de 2009 el 90 por ciento de los casos de influenza en el país correspondía al A H1N1, aunque para mayo de 2010 el porcentaje bajó hasta 10 por ciento y el resto era del virus estacional que es menos transmisible.
México anunció al mundo la presencia del nuevo virus de la influenza, y en cuestión de días la capital y varios estados quedaron prácticamente paralizados por la suspensión de actividades.
Posteriormente, la epidemia fue declarada como una pandemia que afectó a más de 200 países y provocado la muerte de poco más de 17.800 personas alrededor del mundo.
Los informes oficiales indicaron que en México se registraron 72.546 casos y 1.289 fallecimientos.
Córdova dijo que hasta el 25 de junio ya sólo había 22 personas hospitalizadas por el virus, una décima parte de octubre, sin embargo, fue el mes en que se registró la taza más alta alto con 216 internados.
Hasta el momento se han aplicado 27 millones de vacunas contra el virus.
Junto a los efectos de la crisis global, la economía mexicana también se vio afectada por la epidemia de gripe porcina al suspender por varias semanas diversas actividades para evitar los contagios por el contacto persona a persona.