La tormenta tropical Isaac está cambiando de rumbo y aunque ligeramente fortalecida se acercaba a la República Dominicana y Haití este viernes, pero no como huracán.
Según los meteorólogos del Centro Nacional de Huracanes será hasta que la tormenta entre al Golfo de México cuando pueda recobrar fuerza, aunque por el rumbo que lleva –cambiando hacia el oeste— pareciera que tocará tierra en Estados Unidos cerca de la frontera entre Alabama y Misisipí y no la de Florida, como se había pronosticado antes.
No obstante, la ciudad de Tampa, en la Florida, donde este lunes comienza la Convención Nacional Republicana, seguía siendo una posibilidad de resultar afectada. En todo caso, es “demasiado pronto para saber”, según dijo un meteorólogo entrevistado.
La tormenta provocó fuertes lluvias el jueves en el oriente y el sur de Puerto Rico, y el oleaje alcanzaba hasta tres metros de altura en el Caribe.
El viernes por la mañana, el “ojo” de Isaac estaba 265 kilómetros (165 millas) al sur de Santo Domingo y tenía vientos máximos sostenidos de 75 kilómetros por hora (45 mph).
Por otra parte, una nueva tormenta tropical, que toma el nombre de Joyce se formó en el Atlántico, pero no planteaba amenaza inmediata a tierra.
Según los meteorólogos del Centro Nacional de Huracanes será hasta que la tormenta entre al Golfo de México cuando pueda recobrar fuerza, aunque por el rumbo que lleva –cambiando hacia el oeste— pareciera que tocará tierra en Estados Unidos cerca de la frontera entre Alabama y Misisipí y no la de Florida, como se había pronosticado antes.
No obstante, la ciudad de Tampa, en la Florida, donde este lunes comienza la Convención Nacional Republicana, seguía siendo una posibilidad de resultar afectada. En todo caso, es “demasiado pronto para saber”, según dijo un meteorólogo entrevistado.
La tormenta provocó fuertes lluvias el jueves en el oriente y el sur de Puerto Rico, y el oleaje alcanzaba hasta tres metros de altura en el Caribe.
El viernes por la mañana, el “ojo” de Isaac estaba 265 kilómetros (165 millas) al sur de Santo Domingo y tenía vientos máximos sostenidos de 75 kilómetros por hora (45 mph).
Por otra parte, una nueva tormenta tropical, que toma el nombre de Joyce se formó en el Atlántico, pero no planteaba amenaza inmediata a tierra.