El número de estadounidenses que solicitaron beneficios por desempleo la semana pasada disminuyó levemente en 3.000, indicando que ha habido menos trabajadores despedidos.
En total fueron presentadas 336.000 solicitudes la semana pasada, con lo que el promedio de las últimas cuatro semanas –una cifra más representativa—subió moderadamente a 338.500.
En los meses recientes, las tormentas invernales y el frío han contribuido a desacelerar el ritmo de las contrataciones, especialmente en los sectores de ventas al por menor y en la construcción. En enero, por ejemplo, apenas si se añadieron 113.000 empleos.
Pero la estabilidad en las cifras de beneficios sugieren que las empresas tienen confianza de que las actividades comerciales serán lo suficientemente fuertes como para justificar la retención de sus empleados.
La mayor parte de los analistas predicen que la economía estadounidense crecerá un 3 % este año, lo cual, de cumplirse, constituiría la expansión más fuerte desde 2005.
En total fueron presentadas 336.000 solicitudes la semana pasada, con lo que el promedio de las últimas cuatro semanas –una cifra más representativa—subió moderadamente a 338.500.
En los meses recientes, las tormentas invernales y el frío han contribuido a desacelerar el ritmo de las contrataciones, especialmente en los sectores de ventas al por menor y en la construcción. En enero, por ejemplo, apenas si se añadieron 113.000 empleos.
Pero la estabilidad en las cifras de beneficios sugieren que las empresas tienen confianza de que las actividades comerciales serán lo suficientemente fuertes como para justificar la retención de sus empleados.
La mayor parte de los analistas predicen que la economía estadounidense crecerá un 3 % este año, lo cual, de cumplirse, constituiría la expansión más fuerte desde 2005.