China reportó este viernes otro descenso en el número de nuevos casos de coronavirus, pero las autoridades en Beijing dijeron que el punto de inflexión del brote no ha llegado aún y que la situación en la provincia de Hubei, el epicentro de la epidemia, sigue siendo grave y compleja.
En el reporte más reciente, China informó de 889 casos nuevos casos a un total de 75.465, con 118 muertes que elevaron el número de muertos a 2.236.
Las nuevas infecciones llevan disminuyendo varios días, pero cambios en la forma en que se define la enfermedad COVID-19 han generado dudas sobre la precisión de las cifras.
La semana pasada, China comenzó a registrar nuevos casos sin esperar resultados de pruebas de laboratorio, lo que disparó la cifra de pacientes. El jueves, sin embargo, volvió a contar solamente a los positivos confirmados por el laboratorio y descontó algunos en los que las pruebas fueron negativas.
Este viernes se reportó también la aparición del virus en varias prisiones de China, con alrededor de 500 infectados, cerca de la mitad fuera de Hubei.
Las autoridades provinciales no dijeron cuándo se diagnosticaron los 271 casos en dos prisiones de Hubei, pero 230 de ellas fueron en un penal de mujeres en Wuhan, reportó un diario local.
El Partido Comunista Chino admitió este viernes el impacto del brote del coronavirus en la economía, pero afirmó que el crecimiento a largo plazo no cambiará.
Lo dirigentes chinos prometieron que la política fiscal será más proactiva y que el gobierno combatirá los riesgos financieros.
Fuera de China
Más allá del territorio continental chino ha habido más de 1.000 casos y 11 muertes.
La alarma más reciente fue en Corea del Sur, donde el número de casos de coronavirus se duplicó de la noche a la mañana a 204, casi todos en la ciudad de Daegu, la cuarta del país.
Corea del Sur reportó el jueves su primera muerte por coronavirus y hay temores de que el brote pueda estar fuera de control. Los centros comerciales y restaurantes de Daegu estaban desiertos este viernes y muy pocas personas se veían en las calles.
En Japón, cientos de pasajeros que pasaron semanas en cuarentena en el crucero Diamond Princess tenían previsto desembarcar el viernes cerca de Tokio.
El país informó la muerte de dos pasajeros mayores, las primeras muertes a bordo, donde los más de 630 casos fueron el mayor grupo de infección fuera de China.
En Irán, se reportó que el coronavirus se ha propagado a varias ciudades del país y en total ha confirmado 18 casos y cuatro muertes.
En Ucrania, la policía detuvo el jueves a 24 personas en disturbios en un poblado del centro del país provocados por temores infección después de que varios ucranianos fueron repatriados desde Hubei a un sanatorio para una cuarentena obligatoria de dos semanas.
Las autoridades atribuyeron el incidente a una “guerra de información” dentro de Ucrania para propagar el pánico.
