El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, utilizará la Cumbre de las Américas para reclamar la imposición de sanciones a funcionarios venezolanos departe del mandatario estadounidense, Barack Obama.
Maduro informó que en la cita de mediados de abril en Panamá entregará a Obama “10 millones de firmas” exigiendo la derogación de sanciones a funcionarios venezolanos.
"Tenemos el apoyo de todo el mundo, una cosa extraordinaria nunca antes vista, diciéndole a Obama deroga el decreto ya", dijo Maduro por televisión, según el periódico venezolano El Universal.
EE.UU. impuso sanciones a siete funcionarios venezolanos por violaciones a los derechos humanos, y calificó a Venezuela como una “amenaza extraordinaria a la seguridad nacional”, término legal que permitiría a las autoridades estadounidenses apuntar más alto con sanciones a la jerarquía venezolana.
Maduro ha rechazado haber sido catalogado como “amenaza”, lo que lo motivó a llevar a cabo una extensa campaña comunicacional y de recolección de firmas contra las sanciones, llegando a acusar a EE.UU. de planificar un ataque contra el país sudamericano.
"Venezuela es una patria de paz, soberana e independiente", dijo el mandatario.
Washington ha negado las acusaciones.
Desde el 20 de marzo, Maduro ha reunido unas 4,5 millones de firmas contra las sanciones, informó.