El secretario general de la OEA, Luis Almagro, salió en defensa de un grupo de legisladores venezolanos del partido opositor que visitó la organización para expresar la crisis que se vive en su país y solicitar la revisión de los mecanismos internacionales para defender la democracia y el respeto de los derechos humanos.
Luis Almagro no solo aclaró que estos legisladores “no son traidores a la patria”, como lo están llamado algunos sectores del gobierno de Venezuela y validó sus derechos a solicitar la intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA).
La Carta Democrática Interamericana (CDI) comienza recordando que “los pueblos de América tienen derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de promoverla y defenderla. Nadie que actúe consecuentemente en esa dirección puede ser un traidor a su patria”, enfatizó el secretario general de la OEA en una declaración.
En su lugar, mas bien resaltó que todo aquel que quiera para su patria más derechos, más libertad, más democracia, y que para ello recurra a la ayuda de las instituciones americanas que tienen su lejano origen allá por Panamá en 1826, debería ser considerado un patriota y un defensor de la democracia, más allá de a qué partido político pertenezca”, sentenció Almagro.
Se espera que la OEA se pronuncie sobre la situación en Venezuela, pero para ello se requiere la aprobación de 18 de sus miembros de un total de 24 para convocar al Consejo Permanente y presentar una resolución. Cabe resaltar que para aprobar la aplicación de la Carta Democrática se necesita la aprobación de los 24 miembros.