El cuerpo del papa emérito Benedicto XVI, con la cabeza descansando sobre un par de almohadas rojas, yacía en la Basílica de San Pedro el lunes mientras miles de personas hacían una larga fila para despedir al pontífice que sacudió al mundo con su decisión de retirarse hace una década.
En la víspera de los primeros tres días de velatorio, funcionarios de seguridad italianos habían dicho que al menos entre 25.000 y 30.000 personas acudirían el lunes. Pero para el final del primer día, unas 65.000 personas pasaron junto al féretro, informó el Vaticano.
Al amanecer, 10 caballeros pontificios con guantes blancos —asistentes laicos de los pontífices y las casas pontificias— llevaron el cuerpo en una camilla de madera cubierta de tela tras su llegada a la basílica hasta su lugar de descanso frente al altar mayor, bajo el imponente baldaquino de bronce de Bernini.
Una guardia suiza saludó mientras el cuerpo ingresaba por una puerta lateral después de que fue transferido en una furgoneta desde la capilla del monasterio donde falleció a los 95 años el sábado por la mañana.
En Fotos | La trayectoria papal de Benedicto XVI
Desde primera hora de la mañana, los fieles hacían fila en la Basílica de San Pedro para presentar sus respetos al papa Benedicto XVI en el sitio donde yace en capilla ardiente. Algunos habían estado esperando durante horas cuando finalmente se abrieron las puertas.
El pontífice retirado, de 95 años, murió el sábado por la mañana en el Vaticano. Benedicto fue el primer Papa en 600 años en renunciar a su cargo en el Vaticano.
Filippo Tuccio, de 35 años, dijo a The Associated Press que vino de Venecia en un tren nocturno para ver el cuerpo de Benedicto.
“Él fue muy importante para mí: por lo que soy, mi forma de pensar, mis valores. Por eso quería despedirme hoy”, dijo Tuccio.
El cuerpo de Benedicto XVI, vestido con las tradicionales vestiduras litúrgicas rojas con una mitra, reposará hasta el miércoles.
El jueves, “el papa Francisco se convertirá en el primer Papa en la historia moderna en presidir como Papa el funeral de su predecesor”, según el sitio web de Vatican News.
“Señor, te amo”, se informa que fueron las últimas palabras que Benedicto pronunció poco antes de su muerte, informó Vatican News.
El secretario personal del Papa jubilado, el arzobispo Georg Gänswein, dijo que una enfermera era la única persona con Benedicto XVI en ese momento.
“No estaba allí en ese momento, pero la enfermera me lo contó poco después”, dijo Gänswein. “Estas fueron sus últimas palabras comprensibles, porque después ya no pudo expresarse”.
El papa Francisco rezó el domingo por el paso de su predecesor hacia el cielo y de nuevo expresó su agradecimiento por una vida de servicio a la Iglesia durante sus presentaciones de Año Nuevo, un día después de la muerte del papa emérito Benedicto XVI.
[Contiene reporte de Reuters y de AP]
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