La calificación de grupo criminal que dió el Departamento del Tesoro de Estados Unidos a la pandilla Salvatrucha (MS13), no afectará la tregua y las acciones de combate al crimen que se proponen las autoridades, según el ministro de Seguridad de El Salvador, David Munguía Payés.
“No yo creo que (afecte) de ninguna manera porque un proceso de pacificación como el que ha comenzado en el país tiene al final la reconversión de los grupos criminales en grupos menos violentos en el alejamiento del crímen”, dijo Munguía Payés.
La designación implica que la MS-13, que empezó como una pandilla formada por salvadoreños en el área de Los Angeles durante los años 80,es sujeta a incautación de bienes vinculados a la organización por parte de las autoridades federales.
El funcionario salvadoreño cree que tampoco será afectado el apoyo que la Organización de Estados Americanos OEA, da al proceso de tregua que habría negociado la iglesia católica. "Una cosa es la visión que tiene Estados Unidos de su propia seguridad, a la cual nosotros contribuimos, y otra cosa es el proceso y las estrategias que en el país se desarrollan", dijo el ministro.
El gobierno de Estados Unidos estima que la MS-13 cuenta con al menos 30 mil integrantes en al menos cinco países, incluido Estados Unidos, donde algunos de sus miembros han sido responsabilizados de varios delitos, incluidos asesinatos.
“No yo creo que (afecte) de ninguna manera porque un proceso de pacificación como el que ha comenzado en el país tiene al final la reconversión de los grupos criminales en grupos menos violentos en el alejamiento del crímen”, dijo Munguía Payés.
La designación implica que la MS-13, que empezó como una pandilla formada por salvadoreños en el área de Los Angeles durante los años 80,es sujeta a incautación de bienes vinculados a la organización por parte de las autoridades federales.
El funcionario salvadoreño cree que tampoco será afectado el apoyo que la Organización de Estados Americanos OEA, da al proceso de tregua que habría negociado la iglesia católica. "Una cosa es la visión que tiene Estados Unidos de su propia seguridad, a la cual nosotros contribuimos, y otra cosa es el proceso y las estrategias que en el país se desarrollan", dijo el ministro.
El gobierno de Estados Unidos estima que la MS-13 cuenta con al menos 30 mil integrantes en al menos cinco países, incluido Estados Unidos, donde algunos de sus miembros han sido responsabilizados de varios delitos, incluidos asesinatos.