Estados Unidos condenó el ataque perpetrado el jueves por islamistas somalíes de Al-Shabab contra una universidad en Kenia, en el que murieron 147 personas, en su mayoría estudiantes.
"Estados Unidos condena en los términos más fuertes el ataque terrorista llevado a cabo contra hombres y mujeres inocentes en la universidad de Garissa", en el sureste del país, indicó un comunicado de la Casa Blanca.
"Ofrecemos nuestras más profundas condolencias a las familias y amigos de las víctimas de este ataque atroz", escribió el portavoz Josh Earnest. "Estados Unidos está ayudando al Gobierno de Kenia y seguirá trabajando con él y otros en la región para derrotar al grupo terrorista shebab", acotó.
Al-Shabab, un grupo islamista afiliado a la organización islamista Al-Qaeda, han multiplicado los atentados en Kenia desde 2011, en Nairobi y en la costa turística del país, especialmente en Mombasa, el principal puerto de África oriental.
Los kenianos lloran a sus muertos tras un ataque de militantes de al-Shabab en una universidad del este de Kenia, el jueves, que dejó 147 muertos junto con los cuatro atacantes.
El gobierno keniano ofreció 220.000 dólares de recompensa por otro miembro de al-Shabab en conexión con el ataque: Mohammed Mohamud Kuno, quien está en una lista de vigilancia del gobierno. Él es sospechoso de ser el jefe de operaciones externas de al-Shabab contra Kenia.
Kuno es buscado para ser interrogado sobre el ataque en la universidad Garissa, donde los atacantes tomaron el campus antes del amanecer del jueves y abrieron fuego.
Fuerzas de seguridad batallaron contra los militantes por 15 horas y rescataron a más de 500 estudiantes antes de que dieran muerte a los atacantes.
Al-Shabab dice que el ataque fue en revancha por la acción militar de Kenia en el vecino Somalia, donde tiene su base el grupo militante islamista.