El Departamento de Justicia de Estados Unidos está desarrollando planes para reasignar jueces de inmigración de forma temporaria a 12 ciudades.
El objetivo es impulsar las deportaciones de ilegales que hayan sido acusados de cometer delitos, de acuerdo a dos funcionarios gubernamentales.
La cartera comenzó a solicitar voluntarios para los traslados, aunque todavía no está claro el número de jueces que serán reasignados ni los lugares a los que serán enviados.
Entre las ciudades apuntadas destacan Nueva York, Los Angeles, Miami, Nueva Orleans, San Francisco, Baltimore, El Paso, Nebraska y Phoenix.
Estas urbes fueron elegidas porque tienen una gran población de inmigrantes ilegales con cargos criminales, dijeron las fuentes.
Un portavoz de la oficina del Departamento de Justicia que administra las cortes de inmigración, confirmó que las ciudades fueron elegidas como destinos posibles para la reasignación de jueces, pero no elaboró sobre el plan.
La intensificación de las deportaciones está en línea con las promesas de campaña del presidente Donald Trump.
El Departamento de Seguridad Nacional pidió la reasignación de jueces, algo inusual porque no administra las cortes.
Un decreto firmado por Trump en enero dejó a los inmigrantes con casos criminales pendientes como prioridad para deportación, más allá de que hayan sido hallados culpables o no.
Esto es un cambio de postura respecto al mandato de Barack Obama, que priorizó las deportaciones de los condenados por delitos graves.
Como parte de las redadas del Gobierno de Trump contra los inmigrantes, el Departamento de Justicia está enviando jueces a centros de detención ubicados a lo largo de la frontera sur del país. Esos movimientos temporales comenzaron el lunes pasado.