El expresidente de la Asamblea General de la ONU y también embajador de Antigua y Barbuda, John Ashe detenido el pasado seis de octubre por formar parte de una red de corrupción salió bajo fianza, pero permanecerá con arresto domiciliario.
Un tribunal de Nueva York consideró que el diplomático reunió los avales necesarios para cumplir con la fianza impuesta de un millón de dólares por lo que fue liberado este lunes por la tarde.
Ashe estará bajo arresto domiciliario y supervisado a través de un brazalete elctrónico. John Ashe fue presidente de la ONU en el periodo de 2013-2014 y se le acusa de haber recibido más de un millón de dólares en sobornos de empresarios chinos, aunque no se descarta que los fiscales añadan otros a lo largo del proceso.
Entre los imputados destaca el multimillonario constructor chino Ng Lap Seng, acusado de estar en el centro del escándalo y de pagar sobornos a Ashe para impulsar la construcción de un centro de conferencias de la ONU en el territorio de Macao.
En esta red de corrupción también está implicado el diplomático dominicano Francis Lorenzo, al que la Fiscalía acusa de estar a sueldo de Ng y de gestionar los pagos a Ashe.