“Los juegos del Hambre” la trilogía de novelas de la escritora estadounidense Suzanne Collins llega a las de cine y en este su primer fin de semana en cartelera ha llamado la atención de gente de todos los rincones del mundo.
La historia se ubica en el futuro lejano y cuenta la historia de Katniss Everdeen, una joven que tendrá que luchar por sobrevivir en un sangriento juego de guerra a muerte organizado por un gobierno tirano, que conmemora su propia existencia.
Alan Silverman de la Voz de América habló con la protagonista del filme Jennifer Lawrence, de 21 años, cuyo talento captó la mirada de la industria del cine luego que el año pasado fuera nominada al Oscar a mejor actriz por su papel en Winter's Bone.
“El papel de Katniss Everdeen, es uno de los papeles más grandes para nuestra generación” explica Lawrence.
La actriz estadounidense admite que tenía algunas dudas acerca de interpretar el papel de un ícono, y afirma “estaba nerviosa porque sabía que después de esto todo cambiaría para mí”. “No sabía exactamente de qué manera cambiarían las cosas y mucho menos si me gustarían o no…como actriz siempre el darte cuenta que el público te ubicaran en un papel demasiado bien, y depende de la manera en la que el papel sea aceptado lo que dictará tu carrera en el futuro.”.
La actriz que nació y creció en Kentucky, convenció a sus padres para que la dejaran actuar cuando tenía 14 años. A pesar de que nunca tomó clases de actuación su talento natural le facilitó conseguir papeles en programas de televisión y películas, que le llevaron a más tarde ser nominada al máximo galardón del cine en América, el premio Oscar.
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Un año después de la nominación, con su rostro en muchos espectaculares del mundo gracias a Los juegos del hambre, Lawrence sabe que su vida cambiará, y está consciente de que este cambio no es repentino, pues ha trabajado mucho para llegar hasta este punto.
La novela que ha vendido 30 millones de copias en todo el mundo, promete romper récords de taquilla este fin de semana.
El filme que fue adaptado por el director de Pleasantville, Gary Ross y la novelista Collins, evoca una utopía decadente, que algunos críticos han catalogado como un panorama intermedio entre la novela 1984 de George Orwell y el éxito de taquilla Gladiador, de Ridley Scott.
Además en el reparto, los jóvenes actores se apoyan en grandes nombres como Woody Harrelson, que interpreta a Haymitch; en Donald Sutherland como el Presidente Snow o el músico Lenny Kravitz en el papel de Cinna.
