Irán advirtió a los Estados Unidos de no tildar a su Cuerpo de la Guardia Revolucionaria (IRGC), como un grupo terrorista y dijo que las bases militares regionales estadounidenses estarían en peligro si se aprobaban más sanciones.
La advertencia se produjo después de que la Casa Blanca anunciara el viernes que el presidente Donald Trump impetraría nuevas respuestas a las pruebas de misiles de Irán, que son consideradas como "terrorismo", así como también las operaciones cibernéticas, como un "nueva estrategia de Irán".
"Como hemos anunciado en el pasado, si se aprueba la nueva ley de sanciones de Estados Unidos, este país tendrá que mover sus bases fuera de los 2.000 kilómetros de misiles de Irán", dijo el comandante de los guardias, Mohammad Ali Jafari, según medios estatales .
Jafari también dijo que las sanciones adicionales pondrían fin a las posibilidades de un futuro diálogo con los Estados Unidos, según los medios de comunicación estatales, y emitió una severa advertencia a las tropas estadounidenses.
"Si la noticia es correcta sobre la estupidez del gobierno estadounidense al considerar a los Guardias Revolucionarios como un grupo terrorista, entonces los Guardias Revolucionarios considerarán al ejército estadounidense como un estado islámico en todo el mundo, particularmente en el Medio Oriente", dijo Jafari.
Los Guardias Revolucionarios (IRGC) son la fuerza de seguridad interna y externa más poderosa de Irán. La Fuerza Quds del IRGC y las personas y entidades asociadas con este grupo, figuran en la lista de organizaciones terroristas extranjeras de los Estados Unidos, sin embargo la organización en su conjunto no lo es para el país de Oriente Medio.
Entre tanto Irán ve a los militantes sunitas musulmanes del Estado islámico como una amenaza existencial para la República Islámica, donde la mayoría de la población es chiíta.
El 7 de junio, el Estado Islámico se reivindicó un ataque al parlamento de Teherán y al mausoleo del ayatolá Ruhollah Khomeini, el fundador de la República Islámica, quitándole la vida a al menos 18 personas. Los guardias dispararon misiles contra las bases del Estado islámico en Siria el 18 de junio en respuesta.
Decenas de miembros de la Guardia, incluidos altos comandantes, han sido asesinados en Siria e Irak.
Programa de misiles
Jafari también dijo que Teherán aumentaría sus capacidades de defensa, incluido su programa de misiles, si Estados Unidos debilitaba el acuerdo nuclear entre Irán y las potencias occidentales.
Según el acuerdo de 2015, Irán acordó limitar su programa nuclear a cambio de la rebaja de sanciones económicas. Sin embargo, se espera que Trump anuncie pronto las nuevas sanciones.
"Los estadounidenses deben saber que la estúpida conducta del gobierno de Trump con el acuerdo nuclear será utilizada por la República Islámica como una oportunidad para seguir adelante con su programa de misiles, defensa regional y convencional", dijo Jafari, según medios locales.
La perspectiva de Washington de retroceder en el acuerdo ha preocupado a algunos de los aliados de Estados Unidos que ayudaron a negociar, especialmente cuando el mundo se enfrenta a otra crisis nuclear con Corea del Norte.
Si Trump no certifica que Irán está en cumplimiento de sus obligaciones, el Congreso de los Estados Unidos tendría 60 días para decidir si impoone nuevas sanciones en virtud del acuerdo. Los inspectores de las Naciones Unidas han verificado el cumplimiento de los términos por parte de Irán.
Más de 110 buques participaron en el ejercicio, incluyendo algunos que tienen capacidades de cohetes y misiles, según un medio de prensa estatal citado por un comandante de la Guardia.