La Guardia Revolucionaria de Irán (CGRI) dijo en un comunicado el domingo que el pueblo iraní y las fuerzas de seguridad acabaron con la la reciente ola de disturbios que según el CGR, fue "fomentada por enemigos extranjeros".
El grupo dijo en un comunicado: "El papel del pueblo iraní fue consciente, piadoso y revolucionario. Junto con la presencia distinguida de decenas de miles de fuerzas voluntarias leales para calmar los disturbios y los esfuerzos sinceros de los hermanos de la Fuerza de Aplicación de la Ley y el Ministerio de Inteligencia, se ha roto la cadena tejida por Estados Unidos, Gran Bretaña, el régimen sionista [Israel], la familia real saudí, los Hipócritas [la Organización prohibida Mojahedin-e-Karl] y los monárquicos".
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El parlamento iraní se reunió el domingo para discutir las protestas antigubernamentales que comenzaron el 28 de diciembre.
Unas 22 personas han muerto y 1.000 han sido detenidas en más de una semana de protestas, según responsables iraníes. El descontento se extendió a más de 80 ciudades y pueblos, en momentos en que miles de jóvenes iraníes de clase trabajadora se manifestaban contra la corrupción, el desempleo y la creciente brecha entre ricos y pobres.
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A última hora del sábado, videos publicados en redes sociales mostraban una fuerte presencia policial en ciudades como Khorramabad, en el suroeste de Irán, donde el miércoles por la tarde por los mismos medios se vieron varios vídeos mostrando a manifestantes lanzando piedras a la policía antidisturbios.
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Conforme las protestas menguaban, el Gobierno ha retirado las restricciones que impuso en Instagram, una de las redes sociales usadas para movilizar a los manifestantes. Pero el acceso a una aplicación de mensajería de uso más generalizado, Telegram, se mantenía bloqueado.
Con información de Reuters