El secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, destacó la importancia de promover el desarrollo económico en el Triángulo Norte de Centro América para combatir la inmigración ilegal y el tráfico de drogas durante un evento organizado por el grupo Atlantic Council.
"Podemos empezar a hacer la diferencia en América Central porque haciendo la diferencia en esta región, disminuyendo la demanda -de nuestro país- de drogas, mejorando la policía, las cortes y los derechos humanos, nosotros haremos la diferencia", aseguró John Kelly.
"La protección de nuestras fronteras en el sur empieza a 15 mil millas de distancia", agregó Kelly al mencionar a sus socios estratégicos en la región como son Guatemala, Honduras, El Salvador, Colombia, Panamá y Costa Rica.
El evento coincide con la presentación del reporte de Atalantic Council sobre la relación de Estados Unidos con el Triángulo Norte centroamericano que mensiona una serie de recomendaciones para su futuro.
El informe titulado “Construyendo un mejor futuro: Un proyecto para el Triángulo Norte de Centro América” aborda el papel de Estados Unidos en esa parte de la región —formada por Guatemala, El Salvador y Honduras— y presenta una propuesta de cómo EE.UU. y los tres países pueden trabajar juntos para resolver los retos regionales.
Kelly también hizo menció a la reunión que tendrán en junio en la ciudad de Miami con representantes de los países considerados aliados en la región para combatir la inmigració ilegal, el tráfico humano y de drogas.
Sobre ésto último, el secretario Kelly que EE.UU. es culpable por "haber hecho casi nada" en frenar el consumo de drogas.
Al respecto de la aplicación de las leyes de inmigración, Kelly aseguró que lo único que hacen es hacer cumplir la ley que ya está establecida, pero que tienen "prioridades en la ejecución de las leyes".
A las personas que insisten en pagar a los traficantes o coyotes, Kelly les dijo "no gasten su dinero" porque seguramente van a llegar a territorio estadounidense, pero serán devuelto de inmediato a sus países y habrán arriegado sus vidas en vano.
Hace dos años, el Congreso de Estados Unidos aumentó la cooperación con el Triángulo del Norte, al aprobar un paquete de ayuda por $750 millones de dólares para tratar de disminuir y controlar la inmigración desde la región, que ha aumentado considerablemente en los últimos años.
En el evento también participan la expresidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, la excanciller de El Salvador, María Eugenia Brizuela y el ex vicepresidente de Guatemala, Eduardo Stein, todos miembros del grupo de trabajo que hizo el informe, además del director para la Iniciativa de Crecimiento Económico de Latinoamérica del Atlantic Council, Jason Marczak.