Este martes, hacia las 6:45 de la tarde (hora local), y a pocas horas de que se cumplan siete años del devastador huracán “Katrina”, la tormenta tropical “Isaac” tocó tierras al sureste de Luisiana convertido en huracán categoría 1, según informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos.
"Fuertes vientos y peligrosa marejada ciclónica están teniendo lugar a lo largo de la costa norte del golfo de México", señaló el CNH alertando por el alto riesgo de inundaciones, aunque Isaac ha encauzado mejor su trayectoria y alcanza velocidades de hasta 130 kilómetros por hora.
Isaac tocó tierra en la desembocadura del río Misisipi, en el distrito de Plaquemines, donde ya hay olas de hasta 2,7 metros y ahora se dirige tierra adentro hacia la ciudad de Baton Rouge, que se espera reciba el impacto directo de la tormenta. Además, amenaza a Nueva Orleans, al norte, pese a la lenta velocidad con la que avanza.
Estados como Luisiana, Misisipi y Alabama declararon Estado de Emergencia para implementar planes de contingencia y prevención.
La ciudad de Nueva Orleans confiaba en ser protegida por las barreras fortificadas por el cuerpo de ingenieros del ejército estadounidense durante los siete años que han pasado desde el huracán Katrina en el 2005.
El presidente Barack Obama dijo en una corta declaración que el gobierno está preparado y organizado para atender las emergencias que surjan al paso del huracán y urgió a la gente a "atender las recomendaciones de las autoridades, seguir sus directrices, incluyendo las órdenes de evacuación si éstas fueran necesarias".
"Este no es momento de desestimar las recomendaciones oficiales –advirtió— tienen que tomarlas seriamente".
El presidente aprobó el lunes una declaración de desastre para Luisiana y otros Estados, de manera que los afectados puedan ser atendidos inmediatamente.
Un impresionante complejo de bombas achicadoras de agua, el más grande del mundo, barreras, canales de protección y un nuevo plan de emergencia que costó $14.500 millones esperan pasar la prueba de una tormenta importante, aunque Isaac llegará como huracán categoría 1 y no categoría 3, para el que está diseñado el sistema.
El mayor problema, según los meteorólogos, será la lluvia, ya que se esperan entre 10 y 18 pulgadas de precipitación. Isaac estará más tiempo que Katrina sobre Nueva Orleans porque se desplaza a menor velocidad.
La ruta pronosticada lleva a Nueva Orleans, pero la alerta de huracán se extiende sobre unos 450 kilómetros (280 millas) desde Morgan City, Luisiana hasta la línea divisoria entre los estados de Alabama y la Florida. Podría tratarse del primer huracán que azota la costa del golfo desde el 2008.
"Fuertes vientos y peligrosa marejada ciclónica están teniendo lugar a lo largo de la costa norte del golfo de México", señaló el CNH alertando por el alto riesgo de inundaciones, aunque Isaac ha encauzado mejor su trayectoria y alcanza velocidades de hasta 130 kilómetros por hora.
Isaac tocó tierra en la desembocadura del río Misisipi, en el distrito de Plaquemines, donde ya hay olas de hasta 2,7 metros y ahora se dirige tierra adentro hacia la ciudad de Baton Rouge, que se espera reciba el impacto directo de la tormenta. Además, amenaza a Nueva Orleans, al norte, pese a la lenta velocidad con la que avanza.
Estados como Luisiana, Misisipi y Alabama declararon Estado de Emergencia para implementar planes de contingencia y prevención.
La ciudad de Nueva Orleans confiaba en ser protegida por las barreras fortificadas por el cuerpo de ingenieros del ejército estadounidense durante los siete años que han pasado desde el huracán Katrina en el 2005.
El presidente Barack Obama dijo en una corta declaración que el gobierno está preparado y organizado para atender las emergencias que surjan al paso del huracán y urgió a la gente a "atender las recomendaciones de las autoridades, seguir sus directrices, incluyendo las órdenes de evacuación si éstas fueran necesarias".
"Este no es momento de desestimar las recomendaciones oficiales –advirtió— tienen que tomarlas seriamente".
El presidente aprobó el lunes una declaración de desastre para Luisiana y otros Estados, de manera que los afectados puedan ser atendidos inmediatamente.
Un impresionante complejo de bombas achicadoras de agua, el más grande del mundo, barreras, canales de protección y un nuevo plan de emergencia que costó $14.500 millones esperan pasar la prueba de una tormenta importante, aunque Isaac llegará como huracán categoría 1 y no categoría 3, para el que está diseñado el sistema.
El mayor problema, según los meteorólogos, será la lluvia, ya que se esperan entre 10 y 18 pulgadas de precipitación. Isaac estará más tiempo que Katrina sobre Nueva Orleans porque se desplaza a menor velocidad.
La ruta pronosticada lleva a Nueva Orleans, pero la alerta de huracán se extiende sobre unos 450 kilómetros (280 millas) desde Morgan City, Luisiana hasta la línea divisoria entre los estados de Alabama y la Florida. Podría tratarse del primer huracán que azota la costa del golfo desde el 2008.
