El mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, rompió relaciones diplomáticas con Colombia y desató una nueva batalla, por el momento de palabras, en la región.
Chávez se mostró indignado por las denuncias de Colombia que lo acusan de esconder a grupos guerrilleros en territorio venezolano, y aseguró que tales declaraciones son muy “graves” e insinuó que de ser necesario iría a una “guerra con Colombia, habría que ir llorando pero habría que ir”.
Sin embargo, para el ahora analista político y ex embajador de Estados Unidos en Colombia, Myles Frechette, el escándalo de Chávez no es más que una “cortina de humo”.
“Chávez tiene enormes problemas internos, tiene elecciones en septiembre, todo le va mal, los indicadores económicos, todo lo demás, entonces el señor está solo haciendo cortinas de humo”, dijo Frechette a la Voz de América.
Según el ex funcionario estadounidense, “todo el mundo sabe que hay campamentos de las FARC en Venezuela” aunque obviamente el mandatario venezolano “no lo va a confesar”, y está esperando que con la llegada del electo Juan Manuel Santos, a la presidencia de Colombia, el tema pierda interés.
No obstante, a pesar que para Frechette, Santos buscará mejorar su relación con Venezuela, especialmente porque Chávez “ha recortado casi todo el comercio entre los dos países y eso suma varios billones de dólares, y eso le interesa mucho a los colombianos, (…) Santos no se va a hincar a pedirle (el restablecimiento de las) relaciones a Chávez”.
Pero para Calixto Ortega, diputado oficialista de la Asamblea Nacional de Venezuela, las acciones que tomó su mandatario fueron lógicas y ya se veían venir.
“Es una especie de ruptura anunciada, parafraseando a Gabriel García Márquez, pero lo es”, dijo el funcionario venezolano a la Voz de América.
Respecto a las acusaciones colombianas, Ortega aclaró que no “he tenido la oportunidad de ver el material (las pruebas), pero vi la descripción de nuestro embajador Roy Chaderton, en donde muestra a una persona bañándose en la playa, y presuntamente la atribuyen a una playa que queda en Venezuela (…) Realmente estábamos esperando ansiosamente que el gobierno del presidente (Álvaro) Uribe a través de su embajador mostrase algunas cosas que resultaran más serias”, argumentó Ortega.
Pese a considerar que las pruebas son falsas y poco serias, el diputado venezolano explicó a la Voz de América que las denuncias colombianas son “sumamente graves, falsas y lo que trata es de sumarse a un coro de opiniones que tratan de enturbiar los días previos a una elección trascendente en Venezuela, como la próxima elección de la Asamblea Nacional”.
La actual disputa entre Caracas y Bogotá podría ser considerada como la peor desde 1987, cuando los dos países estuvieron al borde de un conflicto armado luego de que un barco de guerra de Colombia fue interceptado por la Armada de Venezuela en una zona marítima bajo disputa limítrofe.
(Para este reporte también colaboró el periodista Leonardo Bonett)
