Hacia las ocho de la noche arribó al Aeropuerto Internacional de Maiquetía Simón Bolívar el presidente venezolano, Hugo Chávez frías, luego de someterse a un procedimiento quirúrgico y gobernar desde Cuba por cerca de 20 días.
"Les digo que este retorno viene convertido en una oración, en un canto, en un compromiso. Una oración a Dios, Cristo, Jesús, mi comandante. Una oración del alma, de agradecimiento, de fe, de amor, de esperanza, en esta batalla que nos ha tocado dar", relató el mandatario a su regreso.
El mandatario venía acompañado de sus hijas y su madre Elena de Frías y fue recibido por el vicepresidente Elías Jaua, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello y el canciller Nicolás Maduro entre otros líderes nacionales.
"Es imposible no sentir un galopar indómito cuando se pisa nuevamente la patria", afirmó el mandatario quien reiteró que viviría mucho tiempo más pero que debía seguir una “Disciplina de recluta” en su tratamiento.
Chávez aprovechó la oportunidad para reiterar que sigue en la contienda electoral, que se concentrará en reelegirse y criticó fuertemente a la oposición venezolana, de cuya agenda, aseguró, estuvo muy pendiente y calificó sus acciones como “un alto acto de irresponsabilidad que raya en lo criminal”.
Finalmente, el mandatario convocó a los venezolanos para este sábado al medio día, donde dijo que hablará con más detenimiento.
El presidente de Venezuela anunció este viernes que se encuentra en el Aeropuerto Internacional José Martí, de Cuba, desde donde parte de regreso hacia su país para retomar las riendas del gobierno.
“Buenas tardes, mundo bueno! Ahora mismo estamos despegando del Aeropuerto Internacional "José Martí" Rumbo Sur, Rumbo a la Patria ¡Gracias Dios Mío!”, declaró el mandatario a través de su cuenta en Twitter este viernes.
Chávez, quien se recupera de una cirugía a la que se sometió por la reaparición de su cáncer pélvico, también reveló que este viernes almorzó en compañía de Fidel Castro y Raúl Castro, actual mandatario, los acompañó hasta el aeropuerto a despedirlos.
Tras casi tres semanas de convalecencia en La Habana, el jefe de estado regresa en medio de la tensión que ha generado el millonario gasto que representó su gobierno desde Cuba, pues se estima que el traslado y permanencia de cerca de 250 personas que lo acompañaron, costó cerca de cuatro millones de dólares.